Raleigh.- Un nuevo informe publicado por Action NC y West Health Institute reveló que dos millones de personas de Carolina del Norte no buscan tratamiento médico ni obtienen sus recetas debido al costo. El informe proviene de una encuesta que consultó a 4.200 votantes probables en Arizona, Colorado, Georgia, Iowa, Maine, Montana y Carolina del Norte.

El reporte sostiene que al menos 2 millones de norcaolinos informan que ellos o sus familiares no buscaron tratamiento por un problema de salud en el último año debido a preocupaciones de costos. Mientras que  aproximadamente 2.1 millones dijeron que podrían no pagar los medicamentos recetados por sus médicos.  Otro millón ha experimentado la muerte de un amigo o familiar en los últimos cinco años porque no podían pagar el tratamiento necesario.

“Los habitantes de Carolina del Norte están presenciando la tormenta perfecta ahora, y no estamos hablando de otro huracán”, dijo Naomi A. Folami Randolph - Hwesuhunu, asesora principal de Action NC. “Este informe refuerza las luchas que millones de habitantes de Carolina del Norte han estado experimentando al no poder pagar el tratamiento médico necesario para su enfermedad y los medicamentos recetados, antes de COVID-19”.

Según la encuesta, los costos de atención médica están aumentando para más de 3 de cada 4 familias de Carolina del Norte y, al mismo tiempo, aproximadamente 575,000 familias de Carolina del Norte han perdido la cobertura de seguro debido al cierre económico provocado por la pandemia.

Además, la encuesta encontró que casi la mitad (47%) de los posibles votantes de Carolina del Norte preferirían un funcionario público que priorice la reducción de los costos de atención médica y la reducción de los precios de los medicamentos recetados en lugar de recortar impuestos o desregularización (43%).

“La pandemia de COVID-19 solo ha aumentado las preocupaciones de la gente sobre el alto costo de la atención médica y ha puesto el tema directamente en la boleta electoral”, dijo Tim Lash, director de estrategia del West Health Institute. “Durante décadas, los políticos han prometido reducir los costos, pero en gran parte se han incumplido. Las personas están frustradas y preocupadas y, lo que es más importante, se están enfermando más e incluso muriendo”.

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