Sonambulismo: lo que hay que saber
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La Academia Estadounidense de Medicina del Sueño define al sonambulismo como un trastorno del sueño que está catalogado dentro de las parasomnias.

Es un trastorno común que sufren muchas personas, aunque suele ser más frecuente en los niños. Si bien no reviste gravedad, puede acarrear algunas molestias y complicaciones en la vida.

¿De qué se trata?

Esta alteración del sueño hace que las personas caminen o realicen actividades estando dormidas.  De este modo, un sonámbulo puede salir de la cama, caminar, ir al baño, buscar algo en los cajones, realizar pequeñas acciones o incluso salir de su casa. Y todo eso mientras está dormido. 

Otra característica frecuente es que, mientras realizan sus actividades, los sonámbulos tienen los ojos abiertos, pero no ven como cuando están despiertos. 

En general, los sonámbulos tienden a volver a la cama por iniciativa propia. Si se alejaron mucho de su cama pueden continuar su sueño en otro lugar.

Por supuesto, la mañana siguiente no recordarán haberse levantado por la noche ni recordarán ninguna de las actividades que realizaron dormidos. 

¿Es frecuente el sonambulismo?

Algunos informes médicos sostienen que alrededor del 18% de la población es propensa al sonambulismo.

También indican que es más común en niños que en adultos. En general el sonambulismo infantil se supera antes de los diez años.

En los adultos no suele requerir tratamiento, especialmente si se trata de episodios aislados. Pero, si se da con mucha frecuencia, sería conveniente realizar una consulta. 

¿Qué podría hacer un sonámbulo?

  • Levantarse de la cama y caminar un rato por la casa.
  • Deambular sin sentido.
  • Abrir los ojos y sentarse en la cama buscando algo.
  • Hacer actividades rutinarias, como vestirse, hablar, limpiar o comer durante el episodio de sonambulismo.
  • Salir de la casa en ropa de dormir o vestidos de cualquier manera.
  • Conducir un automóvil.
  • Orinar en cualquier lado como en un ropero o en un cajón, creyendo que están en el baño
  • Tener relaciones sexuales sin enterarse.
  • Tener accidentes y lesionarse. Por ejemplo, pueden caer de las escaleras, chocar con algo, romper un vidrio y cortarse, etc.

Al despertar pueden

  • Tener mucha dificultad para despertarse durante un episodio de sonambulismo.
  • Estar confundido por un breve período después de ser despertado.
  • No recordar el episodio por la mañana. Ni recordar nada de lo ocurrido durante el episodio.

¿Por qué ocurre? 

No es posible hablar de una causa específica, pero se sabe que hay factores que pueden contribuir a la aparición de un episodio de sonambulismo.

Entre esos factores están

  • Haber estado mucho tiempo sin dormir.
  • Estar atravesando situaciones de mucho estrés.
  • Tener fiebre muy alta.
  • Tomar ciertos medicamentos como:  hipnóticos, sedantes o medicamentos para los trastornos psiquiátricos.
  • Consumir alcohol o drogas.

¿Qué complicaciones puede traer?

El sonambulismo no es una gran preocupación, sin embargo, puede generar complicaciones a quien lo padece. Algunas de esas complicaciones son: 

  • La persona puede lastimarse durante el episodio de sonambulismo.  Especialmente si caminan cerca de lugares peligrosos, si manejan un automóvil o si comen algo que les haga mal. 
  • La persona con sonambulismo puede tener somnolencia durante el día por no haber descansado bien. Esto puede acarrear problemas en la concentración o en la atención generando dificultades escolares o laborales. 
  • Puede generar problemas en la convivencia, ya que su sonambulismo puede interrumpir o alterar el descanso de los demás.
  • Otra complicación es que la persona con sonambulismo puede sentirse avergonzada por esto que le ocurre mientras duerme y que no puede controlar. 

Si tú o un familiar tienen sonambulismo…

  • Es aconsejable tomar algunas medidas de seguridad para evitar lesiones. Algunas de ellas son: cerrar y trabar las ventanas y puertas exteriores antes de dormir. Bloquear las escaleras. Despejar los elementos que puedan provocar tropiezos. Poner los objetos filosos fuera del alcance del sonámbulo. 
  • Durante el episodio se recomienda acompaña suavemente al sonámbulo nuevamente hasta la cama. 
  • No es peligroso despertar a un sonámbulo, pero puede ser perturbador si la persona se despierta y no entiende lo que está pasando.
  • Tratar de mejorar la calidad del sueño.  Fijar una rutina regular de sueño. 
  • Controlar el estrés. 

Si los episodios se repiten con mucha frecuencia es recomendable consultar a un profesional.

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