Santiago de Chile, 30 jul (EFE).- Carmen Gloria Quintana, que fue rociada con combustible y quemada por militares chilenos en 1986, se reunió hoy con la presidenta Michelle Bachelet, a quien pidió que se levante el secreto de 50 años que se estableció a un informe sobre la tortura durante la dictadura de Augusto Pinochet.

"Estuvimos conversando sobre la agenda de derechos humanos que la presidenta tiene y también sobre las demandas que yo realicé, respecto de que se derogue la ley de secreto de 50 años que pesa sobre el Informe Valech", dijo Quintana a los periodistas tras el encuentro con la mandataria en el Palacio de La Moneda, sede de Gobierno.

El informe, dado a conocer en 2004 durante el Gobierno de Ricardo Lagos (2000-2006), dio cuenta de 33.000 casos de personas torturadas o encarceladas por razones políticas durante la dictadura.

En ese momento se estableció que el documento sería confidencial durante medio siglo para preservar la identidad de las víctimas que dieron información.

Pero la reapertura del "caso Quemados" con la detención esta semana de doce exmilitares ha reflotado el debate en torno a la conveniencia de levantar el secreto para obtener nueva información sobre las violaciones a los derechos humanos.

Quintana aseguró que la presidenta se comprometió a estudiar la posibilidad de revelar el contenido del informe e impulsar un proyecto de ley para retirar los grados a los militares retirados involucrados en violaciones a los derechos humanos durante el régimen de Pinochet (1973-1990).

"La presidenta quedó muy seriamente comprometida a estudiar estos temas, así que salgo muy contenta y esperando que haya prontamente actos y gestos concretos que apunten a la verdad, a la justicia", afirmó.

Bachelet, en tanto, evitó referirse directamente al Informe Valech pero subrayó que Chile "necesita saber lo que sucedió" en esa época.

"Necesita no quedar en la oscuridad, poder conocer la verdad porque esa es la manera de que sea una herida limpia y pueda sanar y cicatrizar", dijo la mandataria durante una actividad oficial en Santiago.

La presidenta agregó que el Gobierno "va a trabajar incansablemente para que podamos remover esa oscuridad y conocer la verdad".

Carmen Gloria Quintana, que reside desde hace años en Canadá, viajó esta semana a Chile para presentar una querella por homicidio frustrado en el proceso reabierto por el juez Mario Carroza a raíz de las confesiones de un exrecluta.

La mujer, que cuando ocurrieron los hechos tenía 18 años, y el fotógrafo Rodrigo Rojas, de entonces 19 años, fueron detenidos, rociados con gasolina y prendidos con fuego durante una protesta contra la dictadura.

Rojas murió a causa de las quemaduras y Quintana logró sobrevivir y recuperarse después de varios años de tratamiento, pese a que tenía más de la mitad del cuerpo quemado.