Caracas, 9 may (EFE).- La oposición venezolana convocó hoy a una marcha para pedir al Poder Electoral que cumpla con los plazos establecidos en el reglamento para revocar el mandato del jefe de Estado, Nicolás Maduro, mientras que el chavismo advirtió que hallaría todas la fallas que surjan en la activación del proceso.

La convocatoria a una movilización para este miércoles, hecha por la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) fue seguida, horas después, por el anuncio del chavismo de que ese mismo día también realizará una marcha, en este caso para celebrar la decisión del Supremo sobre un programa social de viviendas.

Además, la manifestación opositora también se ve obstaculizada por el hecho de que el alcalde del municipio caraqueño de Libertador, el chavista Jorge Rodríguez, advirtió que su despacho no ha aprobado una movilización de la MUD en su territorio, donde está ubicada la sede del Consejo Nacional Electoral (CNE).

Rodríguez, que además preside una comisión presidencial para analizar las acciones de la oposición para activar el revocatorio, dijo este lunes que cada una de las 1.850.000 firmas recogidas por la MUD para iniciar el proceso de referendo serán analizadas para detectar un posible fraude.

"Tenemos fuertes indicios que señalan que hubo un fraude a la ley en esas firmas que ellos presentaron (...) se están empezando a ver firmas sin huella, nombres sin cédula y otra vez tres muertos firmando", dijo hoy el alcalde tras señalar que es "imposible" que el revocatorio se realice este año.

También señaló que si hay algún nombre que aparezca entre los firmantes pero que en realidad nunca estampó su rúbrica, esta persona "tiene derecho a que la saquen".

En esta misma jornada, el ministro para el Trabajo de Venezuela, Oswaldo Vera, afirmó que los trabajadores de la administración pública que firmaron para activar el revocatorio en contra de Maduro, no pueden ser despedidos por una causa política pues este Gobierno no "persigue".

La declaración del ministro se produce días después de que el diputado oficialista, Diosdado Cabello, considerado uno de los hombres más importantes del chavismo, señalara que los altos funcionarios de la administración pública que hayan firmado para activar el revocatorio deberían ser destituidos.

Mientras tanto, la oposición reiteró la convocatoria a marchar el próximo miércoles en Caracas y en todas las demás ciudades donde exista una oficina electoral en demanda de que el CNE agilice los trámites hacia el revocatorio.

"La movilización para exigir respeto al Reglamento vigente Revocatorio VA y será en TODO el país! MIÉRCOLES 11 #VzlaExigeAlCNE", escribió el dos veces candidato a la Presidencia Henrique Capriles en la red social Twitter horas después de que lo anunciara en la mañana.

Por la misma vía, el presidente del Parlamento, Henry Ramos Allup, dijo: "Todos el próximo miércoles (...) en marcha hasta CNE (centro de Caracas) para exigirle cumplir plazos RR (referendo revocatorio)".

La prisa de la oposición para que el revocatorio se active este año se debe a que, de no realizarse en 2016, se vence el plazo constitucional para que pueda ser electo un nuevo Gobierno y, de resultar revocado, Maduro le cedería el mando a su vicepresidente de turno.

Ya Capriles había advertido el viernes pasado que este domingo, supuestamente, ya se cumplía el lapso de cinco días continuos establecidos en el reglamento para que el CNE contara todas las firmas que la oposición le entregó hace una semana y hoy debió haberse iniciado el proceso de validación de esas rúbricas.

El gobernador señaló que si el CNE no se pronuncia este lunes para decir dónde y cuándo deben ir a validar sus rúbricas las personas que firmaron en esta primera etapa para solicitar el revocatorio, entonces se realizará la movilización.

"Como todo indica que no lo van a hacer (...) el día de mañana estaremos reafirmando la convocatoria", dijo Capriles en la emisora privada RCR y aclaró que esta movilización será "peatonal" por lo que no se obstruirán las calles para cumplir con la trayectoria hasta el CNE.

Además, la MUD aseguró hoy que el Poder Electoral culminó el proceso de revisión de las casi dos millones de firmas, un número de rúbricas que se traduce en al menos ocho veces más de lo requerido por las autoridades, que equivalen a poco menos de 200.000 o 1 % del padrón electoral.

De ahí que la oposición mantenga que no hay justificación para seguir dilatando el proceso para la activación del referendo con el que espera recortar el mandato de Maduro.