Winston-Salem.- Decenas de familias que residen en la Yarbrough Avenue, en Winston-Salem, llevan años viviendo en “condiciones deplorables” y denuncian que la empresa propietaria de los apartamentos no cumple con el código de vivienda municipal. Los inquilinos, la mayoría latinos, se han unido para pedir al alcalde de la ciudad que tome acción.
“Mi apartamento se inunda. El agua se mete, cruza por la puerta de la cocina y sale por la puerta de la sala”, explicó Mariana Beltrán, una de las residentes. “Tengo filtraciones por las paredes, ventanas rotas y muchas humedades”.
Beltrán, madre de seis hijos, dijo a Qué Pasa que lleva 17 años viviendo en estas condiciones. Y no es la única. Junto a ella, otras sesenta familias padecen desde hace tiempo continuas inundaciones, peligros eléctricos, desbordes de aguas negras y fugas de techos y baños, entre otros problemas.
Con el apoyo del Congreso de Organizaciones Latinas de Carolina del Norte (NCCLO), los residentes se han organizado desde junio del 2021 para pedir a la Ciudad que garantice que el dueño haga mejoras.
Según el NCCLO, las viviendas son propiedad de Old Towne CGC LLC, una subsidiaria de Cedar Grove Capital Partners, cuya sede se encuentra en Nueva York. Qué pasa ha contactado con la empresa, pero hasta la fecha no ha recibido respuesta.
Desde NCCLO opinan que la atención que las familias han recibido por parte del gobierno municipal a sus reclamos ha sido “mínima”.
“La Ciudad tiene la autoridad de obligar al dueño a cumplir con el Código de Vivienda municipal”, dijo Megan Gregory, miembro de NCCLO. “La verdad es que hemos tenido dificultad para que hagan un trabajo completo”.
Gregory explicó que tras varias peticiones de inspección a la Administración municipal, a través de la plataforma CityLink, y algunos encuentros en persona con funcionarios locales, incluido el alcalde, Allen Joines, 16 viviendas fueron inspeccionadas, “pero solo se citaron violaciones menores”.
“La Ciudad no ha indicado ninguna intención de exigir al propietario que se ocupe de las inundaciones, el moho, los peligros eléctricos, los desbordes de aguas residuales y las fugas importantes en los techos y las duchas”, señalan desde NCCLO.
En respuesta, el alcalde Joines escribió en un correo a Qué Pasa que “la Ciudad hará cumplir encarecidamente todas las cuestiones del código de vivienda aplicable en los Yarbrough Avenue Apartments”.
Dicho código describe las condiciones bajo las cuales un edificio residencial es “inadecuado para la vivienda humana” y lista una serie de regulaciones que deben cumplirse para que la unidad sea habitable y segura para la salud de los inquilinos.
Visita del alcalde
El miércoles, 22 de diciembre, estaba previsto que el alcalde Joines y otros funcionarios municipales visitaran los apartamentos de Yarbrough Avenue a las 2 de la tarde, en un encuentro organizado por NCCLO y los inquilinos.
“Estoy contenta de que (el alcalde) venga porque quiero que vea las condiciones en las que estamos viviendo, que toquemos su corazón”, dijo Beltrán. “No buscamos un beneficio económico. Buscamos que nos arreglen los apartamentos porque no vivimos gratis”.
La mexicana dijo que en alguna ocasión ella y su familia se plantearon mudarse, pero no pueden. “Muchos de nosotros no nos queremos ir de aquí porque no manejamos”.
La mujer explicó que los apartamentos se encuentran a poca distancia de supermercados, tiendas y otros lugares a los que las familias pueden llegar a pie.
“Estamos peleando por nuestro derecho” a una vivienda digna, dijo Beltrán. “Pase lo que pase vamos a seguir adelante porque necesitamos vivir en un lugar seguro. Necesitamos una vivienda segura”.
