Las encías pueden inflamarse por diversas razones, aunque en muchos casos, este problema puede ser síntoma de la enfermedad de las encías. Es importante que averigües cuál es la causa de la inflamación, de forma que puedas elegir el tratamiento adecuado (ya sea apostando por remedios caseros o pidiendo cita con el dentista). Éstas son algunas de las causas más frecuentes:

Cepillado de dientes incorrecto o mal uso del hilo dental. En muchos casos, las encías se inflaman como respuesta a una mala higiene oral, debido a la acumulación de placa entre los dientes y en la línea de las encías. Si quieres solucionar este problema, tendrás que empezar por cepillarte bien los dientes y utilizar hilo dental de forma regular para eliminar el exceso de placa. Además, muchas personas utilizan el hilo dental sin poner cuidado al pasarlo entre los dientes, lo cual también puede producir irritación e inflamación.

Gingivitis y periodontitis. Si no se mantiene una buena higiene oral, pueden aparecer enfermedades de las encías como la gingivitis y la periodontitis. La gingivitis es una afección leve, y es reversible si se trata a tiempo. La periodontitis, por el contrario, es un problema más serio y puede conducir a la pérdida de piezas dentales. Si sospechas que puedes sufrir de alguna de estas enfermedades de las encías, debes consultarlo con tu dentista.

Úlceras bucales. Las úlceras bucales que se forman en las encías pueden producir dolor e inflamación. Puedes identificar estas úlceras (también conocidas como aftas bucales) fácilmente por su aspecto; la lesión suele presentar bordes enrojecidos y centro blanquecino. A veces pueden aparecer varias úlceras bucales a la vez, pero por lo general son fácilmente tratables y no contagiosas.

Quimioterapia. Uno de los muchos efectos secundarios de la quimioterapia es la inflamación de las encías hasta el punto de producir dolor y sangrado. Este tratamiento también puede provocar la aparición de dolorosas úlceras y heridas en las encías. Aunque todos estos síntomas se pueden aliviar, no cesarán mientras dure la quimioterapia.

El tabaco. Fumar cigarros y utilizar otros productos con tabaco suele contribuir a la irritación y la inflamación de las encías. De hecho, los usuarios de productos con tabaco son mucho más propensas a desarrollar enfermedades de las encías que los no fumadores y los que no utilizan tabaco de ninguna forma. Una prueba de esto es que el primer paso para reducir la inflamación de las encías, por recomendación médica, es dejar de fumar.

Las hormonas. Las encías inflamadas pueden ser consecuencia de un incremento significativo de la secreción hormonal, lo cual aumenta también el flujo sanguíneo que llega hasta las encías. Entre estas hormonas se incluyen aquellas que se producen durante la pubertad, la menstruación, el embarazo y la menopausia. Algunas píldoras anticonceptivas también pueden aumentar la secreción de determinadas hormonas.