Raleigh, 1 marzo 2016.- A casi un mes del asesinato del taxista dominicano José Nicolás Domíguez salieron a la luz los primeros detalles del crimen.

De acuerdo a las órdenes de arresto de los sospechosos, Dominguez de 55 edad fue encontrado muerto a poca distancia de su vehículo, el cual había chocado contra un poste de luz y estaba aún con el motor encendido cuando llegó la policía.

Además los documentos oficiales señalan que el robo habría sido el móvil del ataque ocurrido la madrugada del 8 de febrero en la cuadra 2010 de la Hodge Creek Drive en Raleigh.

La víctima que trabajaba en la compañía Amigo Taxi, habría recibido varios impactos de bala al interior del vehículo. Las autoridades encontraron varios casquillos de bala dentro del auto y al lado de su cuerpo, según el orden de arresto.

El documento indicó además que había múltiples huellas de zapatos con sangre en el estacionamiento donde se encontraba el cuerpo de Domínguez. Estas evidencias llevaron a la policía hasta una zona donde los testigos describieron haber visto a un hombre entrar en el lado del pasajero de un vehículo que lo esperaba para huir de la escena del crimen.

Hasta el momento la policía ha detenido a dos sospechosos: Major Earl Edwards Jr., quien fue acusado de asesinato y a Rashad Patterson.

La policía halló el auto Nissan Sentra 2015, que fue usado para la fuga, en la residencia de Edward. En su interior encontraron sangre en el lado del pasajero.

Durante el hallanamiento del apartamento de Edwards, las autoridades también localizaron dos teléfonos que pertenecían Patterson y a un tercer sospechoso aún no identificado. Los aparatos fueron usados antes del crimen y la policía cree que pueden contener evidencias del caso.

El asesinato de Domíguez, a quien sus amigos llamaban "Papín", generó gran conmoción entre la comunidad, en particular en la colonia dominicana, que expresó su pesar y rechazo ante el crimen.

Sus compañeros de trabajo y colegas de otras compañía de taxi realizaron una caravana a la corte del condado Wake, para exigir justicia. También acompañaron el féretro durante el velatorio en Raleigh. 

Los restos de Domíguez fueron enviados a Nueva York donde vive su familia.