Raleigh, 28 enero 2016.- Un estudiante hondureño de 19 años fue detenido por ICE la mañana del jueves en la puerta de su casa cuando se dirigía a la escuela secundaria Riverside High School en Durham, donde estudiaba. Wildin David Guillén Acosta fue arrestado por agentes de inmigración poco antes de las 7:00 am en la puerta de su vivienda ubicada en la calle Liberty Street, en Durham.

Héctor Guillén, padre del joven, se encontraba en la casa cuando sucedieron los hechos. Él contó a Qué Pasa que su hijo salió a calentar el motor de su auto para irse al colegio cuando fue interceptado por los agentes del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) que llegaron vestidos de civil y estaban esperando en el estacionamiento del complejo de apartamentos.

"Cuando yo me asomé ya vi que lo estaban agarrando. Eran dos y cuando abrieron su chaqueta mostraron que eran de ICE", dijo a Guillén. "Lo tiraron al piso, lo esposaron y se lo llevaron", añadió el padre que vio, impotente, toda la escena sin poder intervenir por temor a que él y su hija menor de 16 años pudieran también ser detenidos por los agentes.

El joven había cruzado la fontera sur el 9 de junio de 2014 desde Honduras, escapando de la delincuencia y la violencia que se vive en ese país, de acuerdo con sus padres.

Tras ser detenido en la frontera, fue entregado a su padres en Durham y siguió su proceso inmigratorio en la corte de inmigración de Charlotte.

Los padres dijeron que después de haber asistido a su primera cita en la corte, el chico decidió no presentarse a la segunda que estaba prevista para marzo de 2015 por temor, debido a que su abogada le dijo que "no había nada que hacer" con su caso porque él ya había cumplido l8 años.

Tiempo después, los padres dijeron que recibieron una notificación en la cual les indicaron que Wildin debía abandonar el país, pero que el joven decidió quedarse porque estaba empeñado en salir adelante.

"Ese era su propósito, iba de su estudio al trabajo y no descansaba porque su plan era ser un profesional y salir adelante", dijo Dilsia Acosta, la madre del estudiante, que no se encontraba trabajando cuando ocurrió el arresto.

La madre contó que el joven hondureño estaba en el último año de High School y que soñaba con ser ingeniero. Por eso estudiaba por las mañanas y trabajaba en las tardes en un restaurante.

"Estoy destrozada porque se llevaron a nuestro hijo", dijo Acosta. "Es una injusticia porque él ha venido a este lugar con buenos propósitos y lo ha demostrado".

La madre dijo que ahora teme por la vida de su hijo porque si finalmente es deportado a Honduras, será víctima de las pandillas delincuenciales.

"En Honduras lo que les espera a los jóvenes es delincuencia, pandillas...por eso muchos menores vienen a este país huyendo no de la pobreza, sino de la delincuencia", dijo Acosta.

"Con la pobreza sabemos que si trabajamos vamos a comer y tener el pan del día, pero la delincuenca solo es muerte, llanto, tristeza. Eso es lo que le espera", añadió la madre.

La madre también le envió un mensaje al presidente Barack Obama: "Yo le diría que haga justicia, que pare ya las redadas", dijo.

 
VER VIDEO