Raleigh.- Más de 500 personas participaron de la tradicional Peregrinación por la Justicia y la Paz que cada año realiza la organización Witness for Peace que este año se enfocó en pedir respeto por los derechos de los inmigrantes y el cese de las deportaciones.

“El mensaje principal es que debemos dar la bienvenida a los inmigrantes y dejar de deportar a la gente y separar a la familias”, dijo Gail Phares, directora regional de Witness for Peace tras la peregrinación que culminó el Viernes Santo en Raleigh luego de cinco días de recorrido por Charlotte, Winston Salem, Greensboro, Chapel Hill y Cary.

“También pedimos que haya acceso a la educación estatal para los inmigrantes sin papeles y que se le den licencias de manejar. Además queremos un cambio en la ley migratoria que sea más justa”, añadió la activista.

Phares dijo que en total, considerando todos los tramos de la peregrinación, participaron este año más de 500 personas en el evento que se realiza desde hace 28 años.

La manifestación más numerosa se dio en Raleigh donde unas 200 personas caminaron desde la sede de la Feria Estatal hasta la cárcel del estado y finalmente a el Capitolio de Carolina del Norte, donde se cerró la peregrinación con el “Camino de la Cruz”.

cientoscaminaronpor3En ese tramo final, los peregrinos rodearon el Capitolio y escenificaron las 14 estaciones de la cruz, en memoria de la pasión de Cristo.

En cada una de las estaciones, los participantes -muchos de ellos inmigrantes indocumentados- compartieron sus testimonios y oraron por justicia para los migrantes y los trabajadores, el fin de las deportaciones y de los tratados de libre comercio que motivan la inmigración a Estados Unidos.

El día anterior, Jueves Santo, los peregrinos marcharon en Cary hasta el centro de detención del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE), en cuyo frontis activistas y líderes religiosos lavaron los pies a algunos inmigrantes.

Un día antes, más de 50 peregrinos caminaron por las calles de Chapel Hill para pedir el acceso igualitario a la educación superior, y que los jóvenes indocumentados puedan pagar matrículas estatales en las universidades y colegios comunitarios del Estado.

Fotos Jorge Linares

cientoscaminaronpor1