Raleigh.- Seis años y medio después de la puesta en marcha del programa 287g en el condado Wake y la deportación de más de 8,600 inmigrantes indocumentados que en su gran mayoría no eran criminales, el alguacil Donnie Harrison sigue defendiéndolo como desde el primer día.
En una entrevista con Qué Pasa, Harrison aseguró que su oficina no utiliza el programa para perseguir y deportar a inmigrantes indocumentados.
“Nosotros no estamos buscando gente indocumentada, sólo estamos haciendo nuestro trabajo”, dijo el alguacil. “La única forma en que sabemos si las personas son indocumentadas es cuando cometen un crimen y llegan a nuestra cárcel”.
Bajo el modelo del programa 287g que opera en la cárcel del condado desde julio de 2008, todos los detenidos extranjeros son evaluados para determinar su identidad y si tienen estatus legal en el país. Si se encuentra que son indocumentados, son entregados al Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE).
“ICE toma la decisión sobre lo que va a pasar con estas personas, no nosotros. Si necesitan ser deportadas o una orden de detención, es enteramente decisión de ICE”, dijo.
Defiende los arrestos por infracciones menores
Pero según las estadísticas de la oficina del alguacil, desde que comenzó el 287g, la mayoría de los detenidos procesados bajo el programa no eran criminales y fueron llevados a la cárcel por cargos menores, en su mayoría, infracciones de tránsito.
En 2014, por ejemplo, de los 783 inmigrantes puestos en proceso de deportación por el 287g, sólo 19 eran considerados criminales.
“Si alguien toma esto (el número de arrestados no criminales) y dice que no hubo un crimen involucrado, está equivocado, porque estas personas no habrían llegado aquí si no hubiera habido un crimen, quizá fue el no tener seguro, pero hubo un crimen involucrado”, dijo Harrison al respecto.
El alguacil también defendió la necesidad de que sus agentes decidan llevar a la cárcel a inmigrantes que son detenidos en paradas de tráfico.
“Si te doy un ticket sigues tu camino, pero si no tienes ningún ID o tienes varios ID’s en tu poder, es nuestro trabajo saber quién eres y la forma en que lo hacemos es llevándote a la cárcel, donde tomaremos tus huellas y podremos determinar quién eres”, explicó Harrison a Qué Pasa.
“Nosotros podríamos encontrar muy tarde de que tu eras un violador o un asesino si no hacemos nuestro trabajo, pero eso no tiene nada que ver con el color de tu piel”, añadió.
Harrison admitió que muchas detenciones de inmigrantes tienen que ver con que no tienen licencias de conducir, pero que su labor es hacer cumplir ley
“Mucha gente dice que tienen que llevar a sus hijos a la escuela o al doctor pero que no tienen una licencia. La respuesta a eso es que todos necesitamos tener una licencia para poder manejar”, dijo Harrison.
“Desearía que hubiera un mejor forma para la gente que quiere venir aquí a trabajar pase por un proceso para estar seguros de que no estén en cuestión cuando son parados…me gustaría que hubiera un camino correcto más simple, pero es algo que yo no puedo controlar, está por encima de mi”, añadió.
Rechaza acusaciones y niega discriminación
El alguacil también respondió sobre las acusaciones de que su oficina violaba los derechos civiles de los detenidos y procesados bajo el programa 287g, según denunció en el 2010 la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) con base a 57 reclamos de inmigrantes arrestados.
Ante la denuncia, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) anunció en 2011 que había abierto una investigación, pero hasta ahora no se han difundido sus resultados.
“Nosotros tenemos una política de puertas abiertas, somos muy transparentes. Ellos vinieron aquí, hablamos, les mostramos todo lo que hacemos, pero no he escuchado nada más sobre eso”, dijo Harrison al referise a la investigación.
El alguacil aseguró también que su oficina busca proteger del crimen a toda la comunidad, incluídos los inmigrantes indocumentados,
“No somos los tipos malos, queremos que la gente venga a nosotros y nos dejen saber si en su vecindario hay alguien que está tratando de sacar ventaja de ellos porque son indocumentados, si han sido molestados o les han robado, queremos ayudarlos”, dijo Harrison.
“Si alguien irrumpió en tu casa pero tienes miedo de decir algo porque eres indocumentado, eso no nos importa, nuestro trabajo es encontrar al que entró en tu casa, no vamos a reportar a ICE”, añadió.
Una buena herramienta disuasiva
El alguacil dijo también que el programa 287g ha servido como una herramienta disuasiva contra el crimen, lo cual podría explicar el paulatino descenso en el número de detenidos puestos en deportación en los últimos años.
“Ahora más gente sabe que tenemos el programa 287g, entonces si alguien está pensando en violar la ley, sabe que puede ser detenido y que podría ser deportado”, dijo Harrison. “Como los radares contra el exceso de velocidad, esta es una buena herramienta para nosotros”, agregó.
NOTAS RELACIONADAS
Accidentado diálogo sobre el programa 287g en Wake
Activistas dialogan con el alguacil de Wake sobre IDs para personas indocumentadas