Raleigh, 23 de julio.- Una madre hispana que fue detenida el pasado lunes en Cary acusada de haber dejado a sus niños dentro de un auto bajo altas temperaturas, aseguró que si bien cometió un error no es negligente con sus hijos y negó que éstos hayan sido entregados a los servicios de protección infantil.
“Yo no soy una mala madre”, aseguró Laura Zárate Castro, de 30 años, quien recibió a Qué Pasa en su hogar junto con sus dos niños para contar su verdad sobre los hechos. “Yo no tengo Facebook, no he visto los comentarios, pero me han dicho lo que se dice de mí: que soy una mala madre, que a los niños me los quitaron y hasta que me van a deportar. Usted puede ver que eso no es así”.
Zárate fue detenida la tarde del lunes pasado en un complejo de apartamentos de Cary luego que una mujer llamara al 911 a reportar que dos niños menores se encontraban solos dentro de un carro estacionado en pleno calor.
De acuerdo con la orden de arresto firmada por un oficial de policía de Cary, los dos menores, un niño de 5 años y una niña de 1 año, estaban dentro del vehículo con el motor apagado, sin aire acondicionado y con los vidrios abiertos hasta la mitad cuando la temperatura ambiente marcaba los 94 grados Fahrenheit.
El oficial también indica que los niños estuvieron en el carro por más de 30 minutos.
Sin embargo, Zárate aseguró a Qué Pasa que los niños estuvieron solo “menos de 10 minutos” mientras ella bajó a la casa de una amiga para entregarle un perfume, ya que ella se dedica a la venta de cosméticos.
“Cuando llegué, eran como las 5 de la tarde, los niños estaban durmiendo. No los quise despertar y decidí dejarlos porque sólo iba a dejar un perfume y los estuve mirando todo el tiempo”, añadió Zárate quien explicó que no quiso ingresar al departamento de su amiga para no dejar de vigilar a sus hijos hasta que vio que llegó una ambulancia y la policía.
“Muchas personas a las que yo les vendo perfumes pueden atestiguar que siempre cargo con mis niños. Ese día cometí un error y yo lo acepto, pero no soy una mala madre”, dijo Zárate.
La mujer agregó que ella y su esposo no quieren dejar a sus hijos al cuidado de nadie y es por eso que no trabaja.
“Por eso mismo no trabajo, porque no quiero dejarlos al cuidado de nadie ya que pasan muchas cosas, como violencia, maltrato, abuso sexual…nos da miedo. Por eso solo vendo perfumes y siempre los traigo a los niños conmigo, no los desatiendo nunca”, dijo.
Zárate dijo que nunca fue separada de sus hijos. Indicó que fue con ellos en la ambulancia que los transportó a un hospital donde un médico certificó que se encontraban bien y que fue recién en ese momento que un policía se la llevó arrestada, no sin antes entregar a sus niños al padre que llegó a esa hora para reunirse con ella.
La mujer también contó que salió en libertad bajo fianza a la mañana siguiente luego de pagar una fianza de $300 y que deberá acudir a la corte el 14 de agosto para responder a dos cargos por delito menor de abuso infantil.
La cadena de televisión ABC11 informó esta semana que Zárate tenía una orden de detención emitida por el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) y que los niños habían sido entregados a servicios de protección infantil.
Zárate lo negó. Dijo que sí fue procesada por agentes de ICE en la cárcel de Wake, a través del programa 287g, pero que la dejaron libre porque no tiene récord criminal y es madre de dos niños estadounidenses.
Vea la historia completa del caso en la próxima edición impresa de Qué Pasa, la próxima semana.