Río de Janeiro, 8 sep (EFE).- El número de agencias bancarias que están con sus puertas cerradas en Brasil por la huelga iniciada el martes por los empleados del sector financiero subió hoy a 8.454 en todo el país, lo que equivale al 35,91 % del total, informaron fuentes sindicales.

El martes, en el primer día de paralización, los huelguistas consiguieron cerrar 7.359 agencias, por lo que la adhesión aumentó casi un 14 % este jueves, ya que el miércoles todas estaban cerradas por el festivo nacional, indicó la central sindical Confederación de los Trabajadores del ramo Financiero (Contraf) en un comunicado.

"Al final de este jueves pudimos constatar, por el aumento expresivo de la huelga, que estamos en el camino correcto y que la Fenaban (Federación Nacional de los Bancos, patronal) no consiguió engañar a los trabajadores con un comunicado con informaciones falsas", afirmó Roberto von der Osten, presidente de la Contraf.

El líder sindical agregó que los coordinadores de la huelga volverán a reunirse con los representantes de la patronal en la mañana del viernes en Sao Paulo para intentar un acuerdo.

Los empleados de los bancos brasileños, tanto públicos como privados, declararon una huelga por tiempo indefinido para presionar por mejoras salariales y otras reivindicaciones.

Los sindicatos pidieron un reajuste salarial anual del 14,78 %, pero la patronal de los bancos tan sólo ofreció un aumento del 6,5 %, pese a que la inflación del último año fue del 9,75 %.

Los trabajadores del sector bancario, actualmente unos 512.000 en todo el país, han protagonizado largas huelgas en los últimos años por esta época, cada vez que tienen que negociar una nueva convención con los bancos. El año pasado la huelga se prolongó por 21 días y sólo fue suspendida cuando los bancos, que ofrecían un aumento del 6,5 %, aceptaron pagar un reajuste del 10,0 %.

Los trabajadores también reivindican este año una mayor participación en las ganancias de los bancos, un salario mínimo para el sector de 3.940 reales (unos 1.193,9 dólares), más de cuatro veces el salario mínimo legal de Brasil, y mejorías en la ayuda de alimentación, así como medidas para reducir los despidos.

La Fenaban alega que las diferentes reivindicaciones hechas por los empleados, si sumadas, superan la inflación del último año, por lo que, agrega, no tiene condiciones de ofrecer un reajuste salarial superior al aumento del índice de precios.

La Contraf considera que la fuerte adhesión de la huelga obligará a los bancos a mejorar su propuesta.

"No tenemos ninguna duda de eso. Esperamos que los bancos revisen su oferta. Los bancos ganan mucho, tienen ganancias fabulosas. Miles estamos en huelga y la sociedad espera que los banqueros resuelvan este conflicto", afirmó el presidente del sindicato.

Según datos de la Contraf, los cinco mayores bancos del país (Itaú, Bradesco, Banco do Brasil, Santander y Caixa Económica Federal) tuvieron un beneficio de 29.700 millones de reales (unos 9.110 millones de dólares) en el primer semestre de 2016.