La Paz, 16 dic (EFE).- Las autoridades bolivianas comenzaron hoy un proceso de liberación de cien mil pequeñas tortugas en el río boliviano Iténez, fronterizo con Brasil, tras haber sido protegidas de los depredadores como parte de un programa diseñado para aumentar la población de los quelonios en la Amazonía.
El presidente boliviano, Evo Morales, la ministra de Medio Ambiente, Alexandra Moreira, y funcionarios brasileños de esa región fronteriza que trabajan en proyectos similares participaron en la liberación de las tortugas en el pueblo boliviano de Versalles.
Las autoridades liberaron este miércoles a las primeras 20.000 tortugas y durante una semana continuarán con el proceso hasta completar la cifra de 100.000.
El programa de protección de las tortugas ha permitido liberar a diez millones de ejemplares en los últimos años, según Moreira.
Morales destacó, por su parte, que el proyecto se incluye entre los programas para cuidar la fauna en esa región amazónica, una iniciativa que involucra al Estado, al municipio y las poblaciones.
Grupos de voluntarios recogen huevos de tortuga de las playas de ríos de la zona, cuidan la incubación cerca del Iténez y las protegen en sus primeros meses hasta que tienen un caparazón suficientemente duro para enfrentar a los depredadores.
El río Iténez es frontera natural y supone casi la mitad de los 3.400 kilómetros de la línea divisoria entre Bolivia y Brasil.