Buenos Aires, 12 abr (EFE).-El presidente de la Corte Suprema de Argentina, Ricardo Lorenzetti, se manifestó hoy en contra de eventuales cambios en el número de miembros del máximo tribunal del país suramericano.

«Cada vez que el Congreso cambió el número de ministros de la Corte, lo hizo para alterar la mayoría y eso trajo mucho desprestigio al presidente», dijo el juez en una entrevista publicada hoy por el diario La Nación, de Buenos Aires.

Las declaraciones de Lorenzetti se conocen en momentos que crecen en la prensa local rumores sobre un supuesto plan del Gobierno de la presidenta Cristina Fernández para alterar la composición del Supremo.

Ese plan, según las versiones periodísticas, se activaría si el oficialismo no logra esta semana el acuerdo del Senado para que el abogado Roberto Carlés se incorpore al Supremo para cubrir la vacante dejada en enero por Eugenio Zaffaroni, que dimitió por razones de edad.

La postulación de Carlés será sometida a votación en la Cámara alta el próximo miércoles, pero al parecer el oficialismo no lograría reunir los dos tercios de los votos necesarios para aprobar el pliego del hombre propuesto por el Ejecutivo.

«Los jueces de la Corte no podemos opinar del candidato que propone la presidenta. Es el Senado el que tiene esa atribución. Y así como nosotros reclamamos que los otros poderes respeten la independencia de los jueces, nosotros no podemos opinar», dijo Lorenzetti al excusarse de evaluar los antecedentes de Carlés, que no tiene experiencia en el Poder Judicial.

La dimisión de Zaffaroni dejó desde enero pasado a la Corte con cuatro miembros, ya que a esta renuncia se sumaron el año pasado el fallecimiento de los jueces supremos Enrique Santiago Petracchi y Carmen María Argibay.

En virtud de una reforma legal aprobada en 2006, el número de miembros de la Corte fue reducido a cinco, sin que ello modificara la entonces composición del tribunal, cuya cantidad de integrantes se iría reduciendo por renuncia o fallecimiento hasta llegar a las cinco sillas.

«En la Argentina el número de ministros de la Corte fue históricamente de cinco», recordó Lorenzetti.

Insistió en que cada vez que se modificó ese número de integrantes «siempre redundó en desprestigio para el presidente y para la propia Corte».