Santiago de Chile, 9 may (EFE).- El ministro de Defensa chileno, José Antonio Gómez, dijo hoy que «la patria no está en peligro porque un puñado de ladrones se haya robado recursos fiscales», en relación con los últimos casos de corrupción que han afectado al Ejército de la nación austral.

«Es un momento complejo, no se puede evadir la realidad. Saldremos adelante con la verdad y total transparencia», expresó la autoridad en la rendición de cuentas de su despacho, que se realizó este lunes.

La Justicia chilena investiga desde hace algunos meses una gran operación de desvío de fondos públicos llevada a cabo por oficiales y miembros del Ejército durante el Gobierno de Sebastián Piñera (2010-2014).

Se indaga el desfalco de al menos cinco millones de dólares de las arcas públicas procedentes de la Ley Reservada del Cobre, que será modificada para ser «más transparente y con mayores fiscalizaciones», ha señalado el Ejecutivo.

La Ley Reservada del Cobre es una normativa que entrega a las Fuerzas Armadas el 10 % de las ventas de la minera estatal Codelco para comprar armas y equipamiento.

«Quienes están involucrados en estos casos no son militares, son delincuentes, delincuentes que ninguna institución, ningún oficial, ningún soldado defiende», aseveró Gómez en un acto público realizado en el Museo Histórico y Militar de Chile.

Uno de los presuntos involucrados es el excomandante en jefe del Ejército de Chile Juan Miguel Fuente-Alba, a quien se le acusa de un presunto enriquecimiento ilícito que le permitió acumular un patrimonio de más de 3.000 millones de pesos chilenos (unos 4,5 millones de dólares) en la última década.

«(Quiero) expresar públicamente que no existe en las Fuerzas Armadas una chequera oculta», enfatizó Gómez.

«No es posible que los comandantes en jefe de las instituciones ocupen los recursos sin la autorización del Ministerio de Defensa y del Ministerio de Hacienda», comentó en la ceremonia el titular de Defensa.