Buenos Aires, 4 jun (EFE).- El poderoso sindicato de camioneros de Argentina realizó hoy un paro para reclamar un aumento salarial del 35 % y rebajas impositivas, y tensó aún más el conflicto entre los gremios opositores y el Ejecutivo con vistas a la huelga general prevista para la próxima semana.

Desde primera hora de la mañana de hoy, el transporte de mercancías se paralizó en el país y resultaron afectados servicios como la recolección de basuras, el abastecimiento de mercadería para los supermercados y de efectivo para los cajeros automáticos y la provisión de combustible, según informaron medios locales.

La Federación Nacional de Trabajadores Camioneros que encabeza el líder sindical Hugo Moyano -titular también del ala opositora al Gobierno en la Confederación General del Trabajo (CGT)- exige, en principio, una subida salarial del 35 % y advierten a la patronal que no se sentarán a negociar ninguna oferta por debajo del 30 %.

Asimismo, el sindicato reclama que se elimine el denominado impuesto a las ganancias, que grava los salarios más altos en Argentina (a partir de 1.750 dólares).

Los reclamos de los camioneros -que coinciden con los de otros sectores, como los empleados bancarios o los aceiteros, que también fueron a la huelga en las últimas semanas- chocan con las pretensiones del Gobierno de Cristina Fernández, que ha buscado poner un techo del 27 % a las subidas salariales que se acuerden en las negociaciones colectivas de 2015, para disminuir el impacto inflacionario.

"¿Por que la señora presidenta no le pide a sus funcionarios que se rebajen el 50 % del sueldo y evita que se le descuente a los trabajadores? Eso es patriotismo. Eso es querer al pueblo, y no la fantasía que nos quieren hacer creer que estamos todos bien", dijo Moyano al hablar ante miles de camioneros en un acto en el estadio del Club Deportivo Español, en Buenos Aires.

Moyano responsabilizó a Cristina Fernández por la quita que sufren los trabajadores en sus salarios por el impuesto a las ganancias, al que calificó como "perverso".

"Vamos a empezar a discutir los salarios de los camioneros, y cuando reclamamos salarios defendemos todas estas cosas que estamos diciendo", dijo el líder sindical.

Moyano aseguró que el gremio no va a convalidar porcentajes de aumento salarial que no permitan "mantener el poder adquisitivo de los salarios".

"Nosotros hemos convocado a estadios muchos mas grande y siempre los llenamos. Eso nos da la tranquilidad de que estamos haciendo las cosas bien, porque el trabajador responde con lealtad hacia la convocatoria", dijo Moyano a Efe al término del acto.

En ese marco de conflicto, las alas opositoras de la CGT y la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) han convocado a una huelga general para el próximo martes.

"El paro tiene que utilizarse como medida de fuerza cuando hay situaciones que no son posibles de solucionar sentados en la misma mesa", subrayó hoy el jefe de Gabinete del Gobierno, Aníbal Fernández, durante su encuentro diario con la prensa.

Para el jefe de ministros, hay que "tratar de encontrar una salida común, que es el objetivo que uno tiene que perseguir" y, por ello, pidió a los sindicatos que "recapaciten".

En las últimas semanas gremios afines al oficialismo han cerrado las negociaciones paritarias con aumentos alrededor del 27 % anual pero los sindicatos enfrentados al Gobierno exigen aumentos de entre el 30 % y el 40 %, además de deducciones fiscales, para compensar la pérdida de poder adquisitivo derivada de la elevada inflación.

Según las cuestionadas estadísticas oficiales, los precios acumularon un ascenso del 4,6 % durante el primer cuatrimestre del año en Argentina, mientras que para las consultoras privadas fue del 7,69 %.

En 2014, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) cerró en un 23,9 %, según el Gobierno, pero las mediciones de las consultoras privadas, defendidas desde la oposición, cifran en promedio la inflación en el 38,5 %.