Sao Paulo, 27 may (EFE).- Brasil, a través de su Programa de Desarrollo de Submarinos (Prosub), ratificó hoy su alianza con Francia para financiar los proyectos de construcción de estos sumergibles con los que contará la Marina brasileña y entrar así a formar parte de los países dominantes de esa tecnología.

Así lo expresaron representantes de la Marina durante un foro de defensa que tuvo lugar en Sao Paulo, en el que fueron abordados principalmente la importancia de la promoción del papel de las Fuerzas Armadas y el estímulo de la investigación y desarrollo en la industria de defensa.

En un balance sobre los proyectos de construcción de submarinos convencionales y de un submarino de propulsión nuclear, llevados a cabo mediante acuerdos gubernamentales de cooperación con Francia, firmados a partir de 2008, los responsables del proyecto confirmaron que la finalización de la iniciativa está prevista para 2025.

"Existe una necesidad estratégica de desarrollar y dominar la energía nuclear y realizar iniciativas que exijan independencia tecnológica de la misma", justificó hoy el contraalmirante Sydney dos Santos Neves, gerente del Proyecto Modular de Obtención de Submarinos Convencionales de la Marina de Brasil.

El índice de participación nacional en los componentes del proyecto lo aportan 600 empresas y el presupuesto estimado del mismo es 6.700 millones de euros (unos 7.236 millones de dólares), explicó Neves.

"La falta de visión estratégica de Brasil es un problema serio y tenemos que avanzar y perseguir la visión de futuro en nociones conceptuales como la investigación y puntos de encaje entre el sector privado y el Gobierno", declaró Luis Nassif, presidente de la Agencia Dinheiro Vivo, organizadora del encuentro.

El brigadier Mauricio Pazini Brandao, profesor del Instituto de Tecnología de Aeronáutica (ITA), consideró que "para el desarrollo de la industria militar, la formación de recursos humanos especializados, dualidad civil-militar y uso pacífico del espacio aéreo son puntos básicos de las políticas del sector aeroespacial".

"Una política extrema", que a juicio del también profesor Luiz Martins de Melo, del Instituto de Economía de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), "integre sus acciones diplomáticas con sus políticas de defensa y de desarrollo económico, y que al mismo tiempo introduzca un concepto innovador en la historia democrática".

Martins de Melo subrayó que un "entorno estratégico", en materia de defensa, "es necesario en el país".

"Los mayores sistemas de proyectos de innovación tecnológica del mundo son los de defensa y salud, lo que muestra claramente la lógica de la acumulación de poder y riqueza de los países desarrollados. Esos sistemas son elementos centrales en el transbordo de las innovaciones más radicales", dijo el académico.