Santiago de Chile, 8 mar (EFE).- El barco Rainbow Warrior, de la organización ecologista Greenpeace, se sumó hoy a la conmemoración del Día Internacional de la Mujer durante su travesía por las aguas del sur de Chile al desplegar un lienzo con el lema "Sin equidad no hay paz #NiUnaMenos".

"Todos los días luchamos por un futuro verde y pacífico. Esta vez nos unimos porque creemos que no podemos tener ese futuro sin equidad y justicia para todos y todas", dijo Amanda Starbuck, directora de campañas de Greenpeace Andino, en un comunicado.

El Rainbow Warrior desplegó el lienzo en la cubierta del barco mientras navega por el sur de Chile en el marco de una campaña para pedir que se protejan las aguas de la región austral de Magallanes ante el avance de la explotación del salmón.

Greenpeace alertó hoy sobre el impacto del cambio climático en las mujeres, especialmente en las que tienen menos recursos económicos.

"El cambio climático es una de las principales causas de la disminución de los suministros de agua, lo que obliga a mujeres y niñas a recorrer mayores distancias para encontrarla, arriesgar su seguridad y dedicarle menos tiempo al estudio o a las fuentes de ingreso económico", sostuvo Starbuck.

"Cada día, mujeres luchan para proteger a sus comunidades del cambio climático. Greenpeace se une a la lucha de todas las que en todas partes del mundo sufren algún tipo de violencia", agregó.

La emblemática embarcación de la organización ecologista llegará este jueves a Ancud, en la isla de Chiloé.

Estefanía González, coordinadora de océanos de Greenpeace Chile, destacó que el barco parará en la isla como una forma de reconocimiento a la "fuerza y coraje" de las mujeres de Chiloé.

El Rainbow Warrior seguirá después en dirección al sur y abrirá sus puertas en Puerto Natales y Punta Arenas, la capital de Magallanes, donde finalizará su paso por Chile y seguirá rumbo a Argentina.

El Rainbow Warrior fue construido con altos estándares medioambientales que lo hacen totalmente sustentable y entró al agua por primera vez en 2011.

Fue bautizado con el icónico nombre de la embarcación de Greenpeace que fue hundida en 1985 por un buzo de los servicios secretos franceses que le colocó una mina en el casco, un atentado en el que murió una persona en el puerto neozelandés de Marsden Wharf.