París, 11 may (EFE).- El primer ministro francés, Manuel Valls, criticó hoy los términos de una resolución de la Unesco sobre los lugares de culto en Jerusalén y en los territorios palestinos adoptada en abril con el voto de Francia, que ha suscitado denuncias por Israel y la comunidad judía en diversas partes del mundo.

"Ese voto no debería haber tenido lugar", señaló durante la sesión de control al Gobierno en la Asamblea Nacional Valls en referencia a la posición de Francia sobre esa resolución, que había sido presentada por siete países árabes, y fue respaldada también por otros países europeos.

Consideró que en ese texto hay "formulaciones desgraciadas que chocan y que incontestablemente tendrían que haberse evitado, igual que ese voto".

En cualquier caso, Valls aseguró que el voto de Francia apoyándola no modificará su posición que "es clara" sobre la cuestión de los lugares santos en Jerusalén.

A ese respecto, recordó que su país defiende "la libertad de acceso y de culto" en Jerusalén, "ciudad símbolo de las tres grandes religiones monoteístas" y que "pertenece a todos los creyentes, sean judíos, cristianos o musulmanes".

El polémico texto de la Unesco, que fue votado por su consejo ejecutivo el 16 de abril, entre otras cosas pide a Israel que restituya la situación que había hasta septiembre de 2000 en el sentido de que era Jordania la que tenía competencia sobre la mezquita de Al Aqsa, incluido "su mantenimiento, su restauración y la regulación del acceso a ella".

En esa línea, también "exhorta a Israel, la potencia ocupante, a que ponga fin a todas las violaciones contra la mezquita de Al Aqsa".