Bamako, 14 abr (EFE).- El acuerdo de paz entre el Gobierno maliense y los grupos rebeldes continúa bloqueado, y mañana se celebrará en Argel una reunión para relanzarlo a través de nuevas bases que conduzca a un consenso entre las partes.
Según una fuente maliense en Argel, distintas delegaciones llegaron hoy a la capital para participar en la reunión, que en un primer momento se organizó para que la Coordinadora de Movimientos del Azawad (CMA), que agrupa a los principales grupos de oposición maliense, rubricase el texto preliminar.
El acuerdo ya recibió un visto bueno preliminar de todas las partes el pasado 1 de marzo en Argel, pero el CMA pidió tiempo.
Tras una primera negativa, el CMA cambió de opinión y prometió a los mediadores que firmaría el acuerdo, pero la semana pasada de rectificó de nuevo su postura argumentando que no apoyaba el documento porque no «tiene en cuenta los intereses y las preocupaciones reales del pueblo de Azawad».
Para el Gobierno maliense el anuncio supuso un nuevo batacazo, y hoy, a pesar de reunirse durante toda la jornada en Bamako para tratar esta cuestión, se ha abstenido de informar si algunos de sus representantes estarán presentes mañana en Argel.
El CMA pide el independentismo o federalismo, así como la repartición de los recursos de Azawad (Gao, Tombuktú y Kidal) y su gestión.
La situación política en Mali es inestable desde que en 2012 el Movimiento Nacional para la Liberación de Azawad (MNLA), junto a otros grupos yihadistas, se hicieron con el control del norte de país y lo controlaron durante cerca de diez meses hasta que fueron teóricamente expulsados gracias a una intervención internacional encabezada por Francia en enero de 2013.
Desde entonces, el Gobierno y los rebeldes mantienen abierto un proceso de diálogo cimentado en una hoja de ruta que ha sido presentada por Argelia.