Kabul, 13 abr (EFE).- Al menos 20 talibanes y 18 soldados afganos murieron, ocho de ellos decapitados, en varios ataques simultáneos contra puestos de control militar en la provincia de Badakhshan, en el noreste del país, donde continúa el intercambio de fuego entre ambos bandos, informó hoy a Efe una fuente oficial.

Un grupo de unos 200 insurgentes atacó el viernes varias estaciones de control del distrito de Juram, lo que desató enfrentamientos con fuerzas de seguridad durante unas cinco horas, en las que 18 militares perecieron y otros diez resultaron heridos, dijo el portavoz del gobernador provincial, Naweed Farootan.

«Los militantes huyeron a montañas cercanas tras el ataque y todavía están intercambiando fuego en algunas partes del distrito», manifestó el portavoz, quien añadió que una decena de soldados permanecen desaparecidos desde el viernes.

El Ministerio de Defensa indicó hoy en un comunicado que al menos una veintena de talibanes perdieron la vida en el ataque y otros 17 sufrieron heridas, mientras que situó en 33 el número de víctimas militares entre muertos, heridos y desaparecidos.

Los talibanes especificaron que 13 puestos de control fueron atacados durante la emboscada, que formó parte de un ejercicio de preparación en la campaña de primavera, cuando la insurgencia aprovecha las favorables condiciones meteorológicas para lanzar ofensivas en todo el país.

El portavoz del grupo insurgente, Zabihullah Mujahid, aseguró a Efe que las tropas afganas sufrieron 49 bajas en los enfrentamientos y elevó a 42 el número de heridos, si bien los talibanes tienden a exagerar el alcance de sus acciones.

El Gobierno inició una investigación para evaluar la labor de varios miembros de las tropas afganas durante el ataque suspendidos de su cargo por supuesta negligencia, manifestó a Efe un portavoz de Defensa, Abdullah Abid.

La OTAN puso punto final en 2014 a su misión de combate en Afganistán, la ISAF, que fue sustituida desde enero por la operación Apoyo Decidido, con alrededor de 4.000 soldados en tareas de asistencia y capacitación de los cuerpos de seguridad afganos.

Estados Unidos continúa su misión «antiterrorista» en el país islámico con 9.800 soldados, que mantendrá sobre el terreno hasta final de año, aunque Washington está revaluando los plazos para sacar a este contingente del país. EFE