Jerusalén, 13 abr (EFE).- El ministro israelí de Inteligencia y Asuntos Estratégicos, Yuval Steinitz, criticó hoy duramente el levantamiento por parte de Rusia del embargo a la venta de misiles a Irán y alertó de que este país apostará por el «rearme» tras el pacto nuclear recién suscrito.
«Aunque Irán reniega artículo tras artículo del acuerdo marco (nuclear con el G5+1) anunciado la semana pasada, la comunidad internacional ha comenzado a aliviar las restricciones» que había impuesto a Teherán, alertó el ministro en un comunicado.
«Esto prueba que el impulso económico que ganará Irán gracias al levantamiento de la sanciones será aprovechado para (adquirir) armamento y no para el bienestar del pueblo iraní», afirmó.
Rusia anunció hoy que levantaba la prohibición al suministro de sistemas de misiles antiaéreos S-300 a Irán, a la espera de que la ONU anule el embargo a las exportaciones de armas a ese país.
Moscú exigirá el levantamiento del embargo internacional una vez se cierre, previsiblemente antes del 30 de junio, el acuerdo nuclear definitivo de las potencias del G5+1 con Irán, anunció el viceministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Riabkov.
Steinitz, mano derecha del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu en todo lo que concierne al programa nuclear de Irán, consideró que el levantamiento del embargo ruso «es producto de la legitimidad que Irán ha obtenido con el acuerdo nuclear».
«En lugar de que la comunidad internacional le exija desistir de su actividad terrorista en Oriente Medio y por todo el mundo, se le permite rearmarse con avanzados sistemas que sólo incrementarán sus agresiones», concluye Steinitz.
El suministro de cohetes S-300 rusos a Irán han sido motivo de preocupación en Israel desde hace años porque, según este país, desplegados en torno a las instalaciones nucleares impedirán cualquier opción militar si fracasan las negociaciones o si Teherán decide finalmente fabricar armas atómicas.
El sistema S-300 es una avanzada batería antiaérea con un alto grado de efectividad en ataques por parte de aviones y misiles enemigos.
El decreto firmado hoy por el presidente ruso, Vladímir Putin, no hace referencia a la posibilidad de suministro inmediato de los S-300 a Irán, pero sí abre la puerta a entregas de este armamento por vía terrestre, marítima o aérea, incluso antes del levantamiento del embargo de la ONU.
En 2010, el entonces presidente ruso, Dmitri Medvédev, canceló el contrato para el suministro de los S-300 a Irán en aplicación de una resolución de la ONU.
Según el contrato firmado en 2007, Rusia debía haber suministrado a Irán al menos cinco baterías de sistemas móviles de defensa aérea S-300.