Beirut, 14 abr (EFE).- El comisionado general de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos, Pierre Krähenbühl, analizó hoy en Damasco con el viceministro sirio de Asuntos Exteriores, Faisal Miqdad, la forma de proporcionar ayuda a los habitantes del campo de Al Yarmuk.

En un comunicado, el portavoz de la UNRWA, Christopher Gunness, explicó que ambos estudiaron «la importancia de reanudar la distribución (de ayuda) para los civiles que quedan o que no pueden escapar del campo de refugiados palestinos de Al Yarmuk», situado en el sur de Damasco.

También hablaron de las vías para garantizar una salida segura para aquellos que deseen abandonar temporalmente el lugar, así como de la manera de ampliar la respuesta humanitaria a los desplazados que han huido a áreas vecinas al campo.

En declaraciones posteriores, Krähenbühl elogió el respaldo del Gobierno sirio, gracias al cual ayer y hoy se ha podido repartir ayuda a los civiles de Al Yarmuk que se han refugiado en el cercano distrito de Yalda.

«La UNRWA espera seguir construyendo sobre esta base en los próximos días», señaló.

El texto agrega que este organismo ha contado además con la cooperación de la oficina del enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura.

La UNRWA advirtió, además, de que la situación sigue siendo «crítica» para miles de civiles dentro y fuera de Al Yarmuk.

Krähenbühl terminó hoy una visita, que inició el sábado, para conocer de cerca la situación en el campo, objetivo de un ataque del grupo terrorista Estado Islámico (EI) desde comienzos de este mes.

En los tres últimos días, los choques entre el EI y facciones rebeldes sirias y palestinas han disminuido e incluso se han trasladado a la zona vecina de Al Hayar al Asuad.

El Grupo de Acción para los Palestinos en Siria dijo hoy en un comunicado que ayer solo hubo combates esporádicos en las inmediaciones de un instituto femenino de secundaria y en las calles Al Yarmuk y Lubia, dentro del lugar.

Pese a su retroceso, «el EI sigue controlando el campo», apuntó a Efe desde Beirut el director la Fundación Yafra para la Ayuda y el Desarrollo de la Juventud, Wesam Sabaaneh, cuya organización estuvo presente en Al Yarmuk hasta el 2 de abril, cuando tuvo que marcharse por la muerte de uno de sus voluntarios.

Entretanto, esta ONG ha enviado un convoy con comida y productos de higiene para 3.000 familias dentro y fuera del campo.

Sabaaneh detalló que en ningún caso el convoy entró en Al Yarmuk porque «es peligroso».

«Hubo residentes del campo que salieron de él para recoger la ayuda en Yalda y luego regresaron», indicó.

Antes del inicio del conflicto en Siria hace cuatro años, vivían en Al Yarmuk unas 160.000 personas, de las que solo quedaban unas 18.000 antes de la irrupción del EI.