París, 8 abr (EFE).- El grupo francés Dassault Aviation se defendió este jueves de las nuevas acusaciones de corrupción por un controvertido megacontrato suscrito en 2016 para la venta a India de 36 aviones de combate Rafale por 7.800 millones de euros.

Dassault Aviation reaccionó a las revelaciones del sitio de información francés Médiapart, que ha publicado varias informaciones en los últimos días sobre ese contrato, y en particular sobre el supuesto pago de un millón de euros en comisiones a un intermediario.

Un intermediario indio que está acusado en ese país de blanquear dinero en otro pedido militar para helicópteros de Augusta-Westland.

En un comunicado, la compañía francesa insistió en que hay "numerosos controles" hechos por organismos como la Agencia Francesa Anticorrupción (AFA) y que "no se ha señalado ninguna infracción".

También que respeta estrictamente la convención de la OCDE de lucha contra la corrupción, así como las leyes nacionales, y que desde comienzos de los años 2000 ha puesto en marcha procedimientos internos para garantizar la integridad, la ética y su reputación en las relaciones industriales y comerciales.

La venta de los cazas Rafale la formalizaron el Nueva Delhi el entonces ministro francés de Defensa, Jean-Yves Le Drian (actual jefe de la diplomacia), y su homólogo indio, y supuso la conclusión de quince años de negociaciones.

India recibió los cinco primeros aparatos en septiembre de 2020 y los tres siguientes el pasado mes de marzo.

Antes de que Médiapart publicara esta semana nuevas informaciones sobre las sospechas de corrupción de Dassault Aviation y sobre la presunta complacencia con la empresa de la AFA y de la Fiscalía Nacional Financiera de Francia, ese contrato había generado diferentes broncas políticas y mediáticas en India.

La portavoz del Ministerio francés de Exteriores, al ser interrogada sobre las nuevas alegaciones de Médiapart, hizo hincapié en que el acuerdo entre los gobiernos de 2016 solo obliga al francés en lo que respecta a la entrega de los cazas y a la calidad de ese equipamiento.

La portavoz insistió en que el Ejecutivo francés no está de ninguna manera implicado en la selección de los socios industriales indios.

Además, las empresas francesas tienen libertad total para elegirlos y luego de someter los acuerdos a la aprobación de las autoridades de la India.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *