Londres, 11 abr (EFE).- La reforma del sistema sanitario protagonizó hoy un debate cruzado entre los dos principales partidos británicos, el conservador y el laborista, prácticamente empatados en las encuestas de cara a las elecciones generales del 7 de mayo.

El primer ministro, el «conservador David Cameron, prometió una inversión adicional de 8.000 millones de libras anuales (unos 10.800 millones de euros) durante la próxima legislatura si sale reelegido, un plan que los laboristas consideran «imposible de creer».

El Partido Conservador se comprometió a asegurar la asistencia médica en el mismo día en los centros de atención primaria para los mayores de 75 años, contratar a 5.000 nuevos médicos de familia y mejorar la coordinación entre los ambulatorios y los hospitales.

«Como alguien que necesitó el apoyo del sistema público de salud en el momento más difícil de su vida, estoy profundamente comprometido con asegurar que está ahí para todo el que lo necesite», dijo Cameron en referencia al tratamiento que recibió su hijo Ivan, con parálisis cerebral, antes de morir en 2009.

Para el portavoz de Economía de los laboristas, Chris Leslie, las promesas de los conservadores responden al «pánico» del partido ante la ligera ventaja que mantiene en las últimas encuestas la formación liderada por Ed Miliband.

Según un sondeo divulgado ayer por la firma YouGov, los laboristas obtendrían el 35 % de los votos en los próximos comicios, por un 33 % los conservadores.

Cameron «todavía no ha dicho de dónde sacará el dinero» para reformar el sistema sanitario, señaló Leslie, para quien «el objetivo de los conservadores de doblar el ritmo de los recortes el próximo año le quita credibilidad a su propuesta para proteger la sanidad».

Como respuesta al plan que ha puesto Cameron sobre la mesa, Miliband presentó hoy un programa para asegurar a cualquier mujer embarazada la asistencia individualizada de una comadrona.

«Entiendo lo importante que resulta esa asistencia para las madres, los bebés y también para los padres. Las familias atraviesan momentos de nervios, pero en ocasiones los recortes en el sistema sanitario hacen que las enfermeras, los médicos y las comadronas no dispongan de tiempo para atenderles como desearían», afirmó el líder de la oposición.

Los laboristas, que han hecho de la reforma sanitaria una de sus prioridades en esta campaña, propusieron ya hace meses aumentar la inversión en el sistema de salud en 2.500 millones de libras anuales (3.375 millones de euros).

En su programa electoral, Miliband se ha comprometido a contratar a 20.000 nuevas enfermeras, 8.000 médicos, 5.000 trabajadores sociales y 3.000 comadronas, un gasto que se propone sufragar con impuestos adicionales sobre el tabaco y las viviendas de lujo.