Estambul, 24 jul (EFE).- El bombardeo de Turquía hoy a posiciones del Estado Islámico (EI) no está relacionado con la cooperación con Washington en la lucha contra el yihadismo acordada el jueves, aseguró el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu.
"Las negociaciones sobre Incirlik son otra cosa, ésta es una decisión nuestra", aseveró Davutuglu en alusión a la apertura de la base aérea turca de Incirlik para operaciones de Estados Unidos contra el EI negociada con Washington.
Ankara avisó a sus socios de la OTAN que iba a lanzar la operación aérea, en respuesta a un tiroteo fronterizo con militantes del EI que causó la muerte a un oficial turco, pero no advirtió a Damasco de sus planes, agregó el jefe del Gobierno en una rueda de prensa transmitida por la cadena NTV.
El primer ministro indicó que los cazas turcos no violaron el espacio aéreo sirio, dado que gracias a las bombas teledirigidas pudieron alcanzar su objetivo sin necesidad de cruzar la frontera.
"Pero si hubiéramos considerado necesario cruzarla, lo habríamos hecho", añadió.
Los cazas turcos "alcanzaron el cien por cien de los objetivos del EI que suponían una potencial amenaza (para Turquía) y los aniquilaron", aseguró.
Davutoglu reiteró que su país está a favor de una "franja de seguridad" en el norte de Siria, pero reconoció que para establecerla se requiere que Estados Unidos imponga una zona de exclusión aérea.
Tal posibilidad no forma parte de los acuerdos en negociación, aunque se podría concretar en los próximos días, estimó.
Por otro lado, al referirse a una amplia operación contra presuntos terroristas, incluidos yihadistas, lanzada hoy en 16 provincias turcas, Davutoglu confirmó la detención de 297 personas, y declaró que las redadas continuarán.
"Ésta no es una operación puntual. No se limita a un momento ni a una zona, sino que continuará de forma amplia", anunció.
En este contexto, consideró necesario luchar contra el proscrito Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), que mató a un gendarme en un tiroteo el lunes y reivindicó el miércoles el asesinato de dos policías en su domicilio.
"No permitiremos que nadie se pasee por la calle con armas y con la cara enmascarada; los llevaremos ante la justicia uno por uno", advirtió.
Davutoglu aludió así a algunos grupos cercanos al PKK que exhibieron armas en los entierros de las víctimas del atentado en la ciudad de Suruç, que causó el lunes 32 muertos en un atentado yihadista contra la izquierda kurda.