Panamá, 28 abr (EFE).- El presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, instó hoy al Banco Centroamericano de Integración Económica (BCEI) a invertir en proyectos de infraestructura que mejoren la seguridad ciudadana y ayuden a combatir el crimen, ya que este es el "principal problema de la región".

"Démosle prioridad a esa agenda de Estado y de inversión en infraestructuras públicas en las áreas de mayor riesgo social porque es la mejor forma de combatir la inseguridad en nuestros países", pidió el mandatario durante la inauguración de la LVI Asamblea de Gobernadores de la institución bancaria regional.

Centroamérica, en especial el llamado Triángulo Norte, conformado por El Salvador, Honduras y Guatemala, es considerada una de las zonas más violentas del mundo, situación que se achaca a la presencia de grupos internacionales del narcotráfico que usan el istmo como puente para llevar la droga a Estados Unidos.

Hoy mismo el Banco Central de El Salvador difundió un informe que situó en el 16 % del PIB el costo que representó para ese país la violencia en el 2014, cuando se registraron 3.912 homicidios, una cifra que este año se podría quedar pequeña teniendo en cuenta que solo en el primer trimestre hubo más de 2.000 asesinatos.

"Hoy en algunos países de Centroamérica mueren más personas que en la época de los conflictos militares" que desangraron la región durante buena parte de la segunda mitad del siglo pasado, declaró el presidente de Panamá, que cerró el 2015 con una tasa de homicidios de 12 por cada 100.000 habitantes, lo que la ubica como una de las naciones menos violentas del istmo.

El BCIE celebra hasta mañana en la capital panameña su Asamblea de Gobernadores, conformada por los ministros de Economía y Finanzas y de los presidentes de los Bancos Centrales de los distintos países miembro.

El Banco regional, que fue creado en 1960 y actúa como brazo financiero del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), tiene una cartera total de inversiones de 6.082 millones de dólares.

En 2015, la entidad desembolsó la cifra récord de 1.503 millones de dólares en distintos proyectos públicos y privados de la región.

"La banca de desarrollo es ahora más importante que nunca porque los mercados se han endurecido frente a las economías emergentes, e incluso países con muy buena calificación encuentran hoy condiciones más atractivas para el financiamiento a través de la banca multilateral", indicó el ministro de Hacienda y Crédito Público de Colombia, Mauricio Cárdenas.

La alta calificación que tiene el BCIE en agencias calificadoras como Standard and Poor's y Fitch le permite "financiar a los países y a los sectores a tasas muy atractivas", indicó Cárdenas, que fue presidente de la Asamblea de Gobernadores durante el año pasado.

"Estamos hablando de un LIBOR (London InterBank Offered Rates) a seis meses del 2 o 3 %, en el caso del sector público, y del 4 % en el sector privado", añadió el ministro colombiano.

Los socios fundadores del BCEI, que tiene su sede central en Tegucigalpa, son Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua y Costa Rica. Panamá, República Dominicana y Belice son "socios regionales no fundadores" y México, Taiwán, Argentina, Colombia y España son "socios extrarregionales".

Durante la ceremonia inaugural, Panamá y República Dominicana firmaron un acuerdo para incrementar su participación en la institución en 255 millones de dólares cada una.

"Aún tenemos mucho camino por recorrer y reitero que la gestión institucional continuará encaminada a lograr una mayor eficiencia operativa, un control interno más sólido y una mayor transparencia y gobernanza", afirmó el presidente de la entidad, el hondureño Nick Rischbieth.

El BCEI financia algunos de los proyectos más importantes que se están desarrollando en Panamá, como la segunda línea del metro de la capital o el parque eólico Penonomé II, el segundo más grande de Centroamérica.