Panamá, 27 nov (EFE).- El Gobierno de Panamá considera que el fallo de la Organización Mundial del Comercio (OMC) en contra de los aranceles impuestos por Colombia a ciertas importaciones es "claro y contundente", y le exige al país vecino que lo acate "en el menor plazo posible", informaron hoy fuentes oficiales.
La decisión es "clara y contundente, solicitaremos al Órgano de Solución de Diferencias de la OMC que proceda con su adopción inmediata, para que su cumplimiento sea exigible a Colombia en el menor plazo posible", declaró a periodistas el ministro panameño de Comercio e Industrias, Melitón Arrocha.
El fallo, que se dio a conocer hoy en Ginebra (Suiza), "confirma que Colombia adoptó medidas inconsistentes con sus obligaciones internacionales, al imponer un arancel mixto que excede los límites a los que se comprometió ante la OMC", apuntó Arrocha.
En el año 2012 Colombia empezó a aplicar aranceles del 10 % a los calzados y textiles provenientes de la Zona Libre de Colón, en el Caribe panameño, y un cargo de 5 dólares por cada contenedor.
El objetivo de la medida arancelaria, según alegaron en su momento las autoridades colombianas, era evitar el contrabando y el lavado de dinero.
El Gobierno panameño acudió al organismo internacional para denunciar que la decisión de Colombia violaba los compromisos adquiridos por ambos países en el Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio de 1994 (GATT, por sus siglas en inglés).
Los aranceles "injustificados", precisó el ministro, "han restringido el comercio de textiles y calzados y han afectado las operaciones de la Zona Libre de Colón", la zona franca más grande del continente, que representa el 8 % del producto interior bruto de Panamá (PIB) y que en la actualidad atraviesa una grave crisis económica.
Según la Asociación de Usuarios de la Zona Libre de Colón (AUZL), los ingresos de la zona franca se redujeron un 12,3 % en 2014 y un 10,9 % en 2013. Las perspectivas para este año no son tampoco nada alentadoras.
Los analistas lo achacan principalmente a la contracción del comercio mundial (agudizada por la desaceleración china) y a las circunstancias que atraviesan dos de sus principales clientes: la situación económica de Venezuela y los aranceles colombianos.
Panamá y Colombia firmaron en septiembre de 2013 un Tratado de Libre Comercio (TLC) para permitir el intercambio comercial entre ambas naciones y agilizar el proceso que realiza el país centroamericano para ingresar a la Alianza del Pacífico, que integran Colombia, Perú, Chile y México.