Guatemala, 14 may (EFE).- El magistrado Alejandro Maldonado Aguirre, designado hoy por el Congreso como nuevo vicepresidente de Guatemala, aseguró hoy que «jamás» tomará una iniciativa para convertirse en el próximo mandatario del país.

«El vicepresidente le sigue al presidente, pero de parte mía jamás habrá una iniciativa de ninguna naturaleza», enfatizó el ahora exmagistrado en una entrevista radial.

Maldonado dijo que llegará al cargo, en el que estará hasta el 14 de enero de 2016, a trabajar con respeto al orden constitucional y al pueblo.

El Congreso lo designó en sustitución de Roxana Baldetti, quien el pasado viernes presentó su renuncia como vicepresidenta, envuelta en un escándalo de corrupción estatal.

Los otros candidatos era la Comisionada Presidencial para la Reforma Policial y el coordinador del Gabinete de Desarrollo Rural, Adela Camacho de Torrebiarte y Adrián Zapata, respectivamente.

El ahora designado vicepresidente agregó que respetará la libre expresión y manifestación y que hará un análisis «concienzudo, sereno, tranquilo y propositivo con la idea de que el pueblo confíe en sus instituciones».

Consultado por la radio Emisoras Unidas de la posibilidad de convertirse en el nuevo presidente debido a las presiones populares que existen para que también renuncie Otto Pérez Molina, Maldonado fue claro en responder que «jamás».

Destacó que llegará al puesto para ser «unificador» porque «no soy miembro de ningún partido, jamás lo seré y estaré al servicio de todo el pueblo».

Comentó que una vez enterado de que había sido designado por el Congreso, presentó de forma inmediata su renuncia como magistrado de la Corte de Constitucionalidad (CC) del país y le fue aceptada.

«Me voy añorando la Corte», añadió, y anunció que llevará a la Vicepresidencia a personal de confianza, aunque aclaró que no llegará con represalias ni a quitarle el trabajo a ninguna persona.

«Haré una evaluación de los cargos de inmediata dirección» y «trataré de ser coherente y cumplirle al pueblo de Guatemala», manifestó.

Maldonado aseguró que su experiencia de 50 años como abogado y 65 de ejercicio político es una garantía de que cumplirá con sus deberes.

El ahora nuevo vicepresidente dijo que Pérez Molina ya se comunicó con él para felicitarlo y que en cuanto lo llame el Congreso asistirá al Órgano Legislativo para la jura respectiva en el nuevo cargo.