Santo Domingo, 26 abr (EFE).- El exmandatario dominicano Hipólito Mejía se enfrenta hoy a su excompañero de fórmula Luis Abinader y a otros dos aspirantes en unas primarias en las que se elegirá al candidato presidencial del opositor PRM para los comicios de 2016, en medio de una jornada en la que se han denunciado irregularidades.
El Partido Revolucionario Moderno (PRM), también anunció que pospuso las votaciones de sus filiales en Europa, Puerto Rico y Nueva Jersey (EE.UU.) debido a dificultades en la entrega de los materiales necesarios para esos comicios.
Mejía, quien gobernó el país en el período 2000-2004, manifestó que luego de su victoria, se agenciará el apoyo de Abinader para enfrentar juntos al oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en las elecciones generales de 2016.
Abinader fue el compañero de fórmula de Mejía en la boleta del Partido Revolucionario Dominicano, al que ambos pertenecían, en las elecciones generales de 2012, cuando ganó el hoy presidente dominicano, Danilo Medina.
Mejía expresó además, su confianza en la comisión organizadora de las primarias, que encabeza quien fue su vicepresidenta Milagros Ortiz Bosch.
«Creemos que el proceso será transparente y estamos en plena disposición de acatar sus resultados», dijo el exjefe de Estado, tras ejercer el sufragio cerca de su vivienda en Santo Domingo.
Abinader, por su parte, afirmó estar completamente «seguro» de que ganará las primarias de su organización, «tal y como lo dicen las encuestas» y precisó, que tras ganar el proceso, enfrentará «a cualquier candidato» del PLD, «ya que todos representan la corrupción».
Al igual que Mejía, Abinader expresó su confianza en los organizadores de la convención y dijo que se acordó que los resultados los ofreciera la propia Ortiz Bosch.
Mientras, el presidente del PRM, Andrés Bautista, dijo que la posposición del escrutinio en varias ciudades del exterior fue acordada con los cuatro candidatos que compiten en la primera convención de ese partido, de reciente formación.
Bautista dijo que el proceso se desarrolla de forma normal en las seccionales de Miami y Nueva York (EE.UU.), aunque los dirigentes de la facción de Hipólito Mejía en esa última ciudad, ofrecieron una conferencia de prensa por televisión local, en la que acusaron a la comisión organizadora de causar el «caos» en las votaciones allí.
Asimismo, se reportó que en San José de Ocoa (sur) se produjeron incidentes entre dirigentes de Mejía y Abinader y también, en el municipio de Cotuí se denunciaron dificultades para iniciar las votaciones, al igual que en muchas mesas ubicadas en el Distrito Nacional y la provincia de Santo Domingo.
Por otra parte, el secretario general del PRM, Jesús (Chú) Vásquez, calificó de «ejemplar» el proceso convencional de esa organización y de «normales» las dificultades denunciadas.
Otra precandidata presidencial por el PRM, Geanilda Vásquez, dijo que espera una conclusión «feliz» del proceso y que del mismo no habrá «vencidos, ni vencedores».
Además de Mejía, Abinader y Vásquez, la convención la disputa también Amaury Justo Duarte, quien consideró que las primarias del PRM serán un «aporte a la democracia» de República Dominicana.
Ortiz Bosch, en tanto, reveló que las votaciones extenderán su horario en los lugares donde se comenzó a sufragar tardíamente, principalmente por la falta de boletas y tinta, al tiempo que señaló que de los 2.700 centros de votación disponibles solo se han reportado dificultades en 14 de ellos.
Bosch destacó que le ha sorprendido la cantidad de militantes que participan en el proceso, tras supervisar varios centros de votación, donde asegura, cientos de personas hacen colas para votar.
«Estábamos esperando tener menos de 1,9 millones de personas con derecho a votar y las cifras llegaron a 2 millones 271 mil personas inscritas, esto elevó la cantidad de centros de votaciones», adujo Bosch.
El PRM, que resultó de la más reciente división del también opositor Partido Revolucionario Dominicano (PRD), enfrenta su primer gran reto hoy con la celebración de sus primarias, que originalmente debieron celebrarse el 29 de marzo pasado, pero se pospusieron por dificultades logísticas, según alegó la formación opositora.