Guatemala, 9 may (EFE).- El exministro de Relaciones Exteriores de Guatemala Harold Caballeros tiene, desde hace casi dos décadas, una estructura financiera «offshore» en Las Bahamas a nombre de su iglesia cristiana El Shaddai, tal y como aparece en los llamados papeles de Panamá.

Según una investigación del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, en inglés) hecha pública hoy por Univision Noticias y el periódico digital salvadoreño El Faro, Caballeros y su esposa, Cecilia Arimany Tejada, son clientes del bufete panameño Mossack Fonseca al menos desde enero de 1999.

Fue en ese momento cuando se creó Apostolic Ministries International Ltd, una sociedad domiciliada en Las Bahamas y de la que ambos fueron directores.

Caballeros explicó, según una conversación con Univision, que esa empresa se constituyó para gestionar las misiones internacionales que se extendían por Portugal, Aruba o España, con el fin de «agilizar la mecánica diaria» de abrir cuentas bancarias.

El Shaddai, cliente número 26636 del bufete Mossack Fonseca, manejaba sus asuntos legales, dirigidos por Caballeros y su familia, a través de la filial de la firma panameña en Guatemala, el bufete Díaz Durán&Asociados.

Según uno de los documentos más recientes de Apostolic Ministries International Ltd, al que tuvieron acceso Univision, El Faro y el periódico guatemalteco Plaza Pública, tanto Caballeros, como su esposa, su hijo Harold y su suegra, María Asunción Tejada, formaban parte de la directiva de la compañía.

Entre los servicios prestados por el bufete panameño a la iglesia están la «custodia de libros legales y el de prestanombres para la directiva» de la firma, una práctica «común» en sociedades ubicadas en paraísos fiscales, cuyos directivos visibles no son los verdaderos beneficiarios.

Actualmente, Caballeros tiene registradas en Guatemala nueve sociedades anónimas; y junto a su esposa y su hijo Harold Caballeros Arimany, suman 18 empresas.

La estructura de la iglesia El Shaddai aglutina una universidad, 27 estaciones de radio y 19 colegios y aunque los papeles de Panamá no revelan los flujos de dinero consignan un registro de activos o aumentos de capital de dos millones de dólares entre las dos empresas.

Después de su fundación en 1983, la iglesia El Shaddai empezó a crecer, mudando de sedes con construcciones bastante modestas hasta que en 1990 se instaló en la que es ahora su sede central, en la zona 14 de la capital, una de las más exclusivas y caras.

Pero esta no es la única empresa «offshore» que posee Caballeros y su familia a través de la iglesia cristiana El Shaddai, pues según revela la investigación su esposa e hijo recibieron acciones y forman parte de la junta directiva de Marbury Company Enterprises Inc, una sociedad incorporada por Mossack Fonseca en Bahamas el 27 de enero de 2000.

También aparece a nombre de Caballeros y su familia la venta de una sociedad «offshore» llamada Sefton Park Inc, cuyo objetivo es invertir en bienes raíces en Estados Unidos y, según la documentación, el valor de los activos supera el millón de dólares.

Otra sociedad que figura como parte de la iglesia es la Inmobiliaria Wittemberg S.A., un ente cuya presidencia ostenta la también pastora Ana María Fernández Hernández y en la que ejerció como tesorero desde noviembre de 2008 hasta 2010 Jacobs Barahona, actual miembro del Parlamento Centroamericano.

El Consorcio Internacional de Periodistas (ICIJ), responsable de la filtración el pasado 3 de abril, puso este lunes a disposición del público la base de datos completa del bufete panameño Mossack Fonseca, epicentro del escándalo y especializado en la creación de sociedades «offshore» en paraísos fiscales.

Se trata de 11,5 millones de documentos que ya han señalado a más de 140 políticos y altos funcionarios de todo el planeta, entre ellos varios jefes o ex jefes de Estado y de Gobierno.