Roma, 12 ene (EFE).- El primer ministro italiano en funciones, Paolo Gentiloni, afirmó hoy que aquellos que dicen querer "cerrar el país contra la inmigración venden humo" y afirmó que la receta para solucionar la crisis migratoria es facilitar canales seguros que acaben con el tráfico de personas.

"Quien piensa o dice que va a cerrar el país contra la inmigración vende humo. Es necesario gestionar la inmigración con canales seguros", dijo Gentiloni durante un encuentro que mantuvo con jóvenes en Turín (norte).

El primer ministro italiano opinó además que "quien siembra la exclusión recoge odio y mina la seguridad", y que por tanto para garantizar la seguridad de cualquier país "no hay que levantar muros, sino encontrar nuevas formas de acogida" para los refugiados que huyen de sus países en guerra.

"La cuestión es gestionar los flujos migratorios porque estas personas se necesitan", señaló.

Gentiloni abordó así el asunto del fenómeno migratorio, uno de los principales desafíos que afronta Europa, después de que esta semana los jefes de Estado o de Gobierno de Chipre, España, Francia, Grecia, Italia, Malta y Portugal hayan pedido en Roma a la Unión Europea (UE) compartir la "carga" de la protección fronteriza ante la presión migratoria.

También habló de la UE y consideró que es necesario que el bloque comunitario muestre "más unión" para que los Veintisiete desempeñen un papel significativo a nivel mundial.

"La UE no es solo un gran mercado, también es un modelo social. Sin un papel determinante del Viejo Continente, puede que se ponga en riesgo la paz. Es necesario que haya más unión para contar más en el mundo y defender un modelo de democracia", valoró.

Finalmente, se refirió al problema del programa nuclear de Corea del Sur y subrayó que es preciso "trabajar para reducir el uso de armas de destrucción masiva" y "favorecer la paz". EFE