Nueva York, 28 mar (EFE).- El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) informó hoy que por ahora mantiene sus operaciones en Yemen a pesar de la campaña de bombardeos iniciada por una coalición árabe y la difícil situación de seguridad sobre el terreno.

"Aunque el deterioro de la situación en Yemen está limitando las operaciones, Unicef continúa trabajando para dar asistencia vital a niños en el país", indicó la organización en un comunicado.

Unicef mantiene en Yemen "un pequeño número de personal internacional" y más de 100 empleados locales, señaló en la nota.

El fondo de la ONU explicó que está suministrando agua, productos higiénicos y atención médica a centenares de familias desplazadas, a cuyos niños acogerá en escuelas que abrirán a partir de mañana.

Hoy fueron evacuados del país el enviado especial de la ONU, Yamal Benomar, y más de 300 personas, entre funcionarios del organismo internacional, cooperantes, representantes de empresas internacionales y sus familias.

Esa salida se produjo en el marco de la escalada de la violencia en Yemen, donde una coalición árabe -liderada por Arabia Saudí- comenzó el pasado jueves a bombardear posiciones de los rebeldes hutíes, que tomaron el poder por la fuerza el pasado febrero.