Arizona, 12 de febrero de 2016- La Comisión Federal del Comercio (FTC) demandó a dos operadores de aparentes escuelas secundarias que ofrecían cursos virtuales y a distancia, por engañar a los consumidores en cuanto a su legitimidad.

La FTC dice que los dos operadores no son legítimos y que en realidad no son más que “fabrica” de diplomas que cobran entre $135 y $349 por un certificado inservible.

En la demanda también ponen en duda la legitimidad de la asociación de los operadores con programas de equivalencia de escuela secundaria reconocidos. Usan nombres como West Madison Falls High School, Columbia Northern High School, Stafford High School entre otros.

Según la FTC los demandados se aprovecharon de la gente que busca obtener un diploma de escuela. La Directora del Buró de Protección del Consumidor de la FTC, advirtió que si una compañía dice que usted puede obtener un diploma en poco tiempo simplemente tomando un examen en línea, es casi con certeza que se trata de una estafa.

La FTC en ambos casos alega que los operadores compraron una serie de nombres de sitios web diseñados con la intención de dar la impresión de ser escuelas secundarias en línea legítimas y usaron términos tales como “GED” y “GED en línea” para que los sitios web falsos aparecieran en los primeros puestos de las búsquedas en internet. Una vez que los consumidores llegaban a las páginas web de los sitios de las escuelas, se encontraban con mensajes que decían que los diplomas ofrecidos por los demandados eran equivalentes a un auténtico diploma de escuela secundaria.

Como pruebas la FTC mostró numerosos casos de consumidores que usaron los diplomas recibidos de parte de los demandados para conseguir empleos, presentar solicitudes de inscripción en escuelas de estudios terciarios e incluso para ingresar al servicio militar, y que descubrieron que los diplomas no eran reconocidos.

De acuerdo a los términos de la demanda de la FTC, los demandados indujeron a error a los consumidores efectuando declaraciones referidas a su pertenencia a organismos de acreditación que no existen y que fueron inventados por los propios demandados. Los demandados Capitol Network  indujeron a error a los consumidores diciendo que estaban certificados por el Departamento de Defensa o que cumplían con sus programas de estandarización de educación en línea.

Las demandas fueron presentadas ante la Corte Federal de Distrito para el Distrito de Arizona.