Miami, 2 jun (EFE).- Varios aspirantes republicanos a la carrera presidencial de 2016 en EE.UU. defendieron hoy en una conferencia en Florida la necesidad de acometer "profundas reformas económicas" con "nuevas ideas", para que el país continúe siendo la primera potencia mundial en el siglo XXI.

En la conferencia, a la que asistieron cerca de medio millar de empresarios, intervinieron, entre otros, el exgobernador de Florida Jeb Bush; el exgobernador de Arkansas Mick Huckabee; el exgobernador de Texas Rick Perry; el gobernador de Wisconsin, Scott Walker; el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, y el senador por Florida Marco Rubio, que habló por videoconferencia.

Las propuestas republicanas en materia económica se articularon, principalmente, en cinco ejes temáticos: la bajada de impuestos, la transferencia de poderes reguladores del Gobierno a los estados, la creación de empleo, el respaldo a las nuevas fuentes de gas y petróleo en Norteamérica y el rechazo a la reforma sanitaria promulgada en 2010 y apodada "Obamacare" por sus críticos.

El gobernador Walker, muy aplaudido durante su intervención, reivindicó la necesidad de impulsar el libre comercio en la economía global del siglo XXI -en alusión al tratado comercial Transpacific Partnership (TPP) que negocian varios países con EE.UU.-, al tiempo que arremetió contra el "Obamacare" y el poder de los sindicatos.

"Creo firmemente que, si vamos a reformar nuestra nación", debemos tomar amplias zonas de poder en Washington y devolver su control a los gobiernos estatales y locales, afirmó Walker en la cita que tuvo lugar en el Centro de Convenciones Walt Disney World Yacht & Beach Club, de Orlando.

Walker, al igual que Jeb Bush, no ha confirmado todavía su candidatura a las primarias republicanas, pero se espera que ambos hagan su anuncio próximamente.

Bush, quien dijo en la conferencia que "pronto dirá si es candidato" a los comicios presidenciales de 2016, cargó contra Obama y aseguró: "Cualquiera de los aspirantes republicanos" a la Casa Blanca "será mejor presidente que Barack Obama o Hillary Clinton".

El hijo y hermano de sendos expresidentes de Estados Unidos erigió en pilar de su proyecto la apuesta por la "innovación y la tecnología" junto al valor del "emprendedor empresarial", todo ello bajo un "nuevo liderazgo" que devuelva su poder a los gobiernos estatales y locales.

También dijo que aspira a llevar a cabo una "reforma migratoria para ser más dinámicos" económicamente, como país y "liderar el mundo en las próximas generaciones".

El gobernador de Florida, Rick Scott, que todavía no se ha decantado por ningún candidato de su formación, fue el anfitrión encargado de presentar a cada uno de los republicanos aspirantes a la carrera presidencial.

"De ser elegido presidente daré a la economía nacional un giro como el que el gobernador de Florida ha dado a la economía de su estado", dijo, por su parte, señalando a Scott, el gobernador de Luisiana, Bobby Jindal, quien apeló al "sueño americano" como la gran aspiración de los inmigrantes, "sin importar su origen social o racial". "Todos somos estadounidenses", dijo.

Y pasó a definir EE.UU. como una suerte de "caos" con un Gobierno federal mastodóntico. "El próximo presidente del país debe reducir el tamaño del Gobierno, incluida la reducción en sus atribuciones", apostilló Jindal.

Christie se centró en la cita en defender una reforma de la Seguridad Social y el Medicare como primeros pasos para llevar a cabo otra integral del sistema de salud y de inmigración.

Ante los asistentes, el exgobenador de Arkansas Mike Huckabee aseguró que su plan sobre impuestos eliminaría todos los "castigos" impositivos a quienes logran éxito, al tiempo que animó a incrementar las inversiones y defendió la importancia de "repatriar el dinero de las corporaciones transferido a paraísos fiscales en el extranjero".

El senador por Florida Marco Rubio, en un mensaje en video, abundó en la idea de que "en este nuevo siglo" la nación se enfrenta con los "cambios más significativos" que han tenido lugar desde la revolución industrial, argumento que empleó para criticar a los líderes del país que "continúan colgados de ideas viejas".

Por su parte, el exgobernador de Texas Rick Perry, quien ya fue candidato republicano a la Casa Blanca en 2012, prefirió apelar a la experiencia que confiere el ejercicio del cargo como factor de gran peso para ocupar con verdadero conocimiento la Casa Blanca.

Elogió la capacitación de la mayor parte de los gobernadores de su formación para acometer reformas en materia de impuestos, regulaciones y educación.

Florida es considerado por los expertos electorales uno de los estados "bisagra" en el resultado de las próximas elecciones presidenciales de 2016, además de escenario fundamental en las elecciones primarias republicanas.