Barcelona, 16 dic (EFE).- Un día como hoy hace 25 años uno de los personajes más importantes de la reciente historia del FC Barcelona, Josep Guardiola, debutó en el Camp Nou de la mano de otro mito; Johan Cruyff, y con 19 años inició una carrera meteórica de títulos y éxitos, tanto de jugador como de entrenador.

El joven Pep Guardiola participó el 16 de diciembre de 1990 en el partido contra el Cádiz en el Camp Nou, que los azulgrana se llevaron por 2-0.

Fue su primera actuación en un partido oficial con el primer equipo, con el que ya se había fogueado tiempo atrás en algún amistoso.

El debut de Guardiola se produjo ante la baja que para ese partido tuvo Johan Cruyff, la del imprescindible Guillermo Amor en el centro del campo.

Aquel día, el Barça formó con Zubizarreta, Nando, Alexanko, Eusebio, Serna, Bakero, Guardiola, Goikoetxea, Laudrup, Julio Salinas y Begiristain.

A pesar de regresar al filial (Barça B), el sello de Guardiola se recuperaría para un Barça que inició en la temporada 1990-91 uno de los periodos más fructíferos de la etapa de Cruyff en el banquillo azulgrana, con la consecución de cuatro Ligas seguidas y la primera Copa de Europa.

La sintonía con la que conectaron la idea de fútbol de Cruyff y las aptitudes del joven centrocampista le ha dado muchos éxitos a un Barcelona cuyas vitrinas repletas de trofeos no se entienden sin el concurso de estos dos exjugadores y también extécnicos del conjunto catalán.

El magisterio absorbido bajo la dirección de Johan Cruyff, más las aptitudes recogidas en otras experiencias, tanto en el Barça con otros técnicos, así como sus apuestas como futbolista lejos del Camp Nou, han configurado una figura de Guardiola como entrenador que le ha llevado al máximo reconocimiento mundial.

Primero en su experiencia en el banquillo del Barça, en la que llegó a arrasar tanto en España como en Europa (14 títulos en cuatro temporadas, más los 19 como jugador), y en la actualidad en el Bayern de Múnich, Guardiola se ha labrado un prestigio que le sitúa como el entrenador referencia en el mundo, todo gracias a una apuesta que en su día, hace 25 años, no dudó en hacer su mentor, Johan Cruyff.