Winston-Salem.- Las investigaciones en torno al asesinato de un agente del condado de Wake, en agosto del 2022, presuntamente a manos de dos hermanos mexicanos, sigue hallando más implicados.
Un tercer familiar, el hermano menor Rolando Marín-Sotelo, de 19 años, fue acusado formalmente por su complicidad en el crimen, según informó el portal Wral News.
Como se recuerda, Rolando fue detenido el 16 de agosto mientras circulaba por las calles de Winston-Salem en un carro con placas falsas. Sobre este joven pesaba una acusación federal por posesión de armamento sin tener un estatus legal en el país.
Rolando Sotelo Marín, conducía un Nissan Sentra al ser detenido por un agente del sheriff del condado de Forsyth.
Por el caso de la muerte del agente Byrd, Rolando fue acusado de ser cómplice indirecto en el crimen al ayudar a ocultar la evidencia.
A mediados de agosto, el hermano menor habría vendido la camioneta que la policía buscaba por todo Carolina del Norte. Este sería el mismo vehículo que los hermanos Marín-Sotelo usaron para escapar después de matar al agente Ned Byrd.
Según los documentos sobre el caso que obtuvo WRAL, Rolando fue vinculado a las investigaciones cuando los detectives revisaron los teléfonos de los hermanos mayores, Alder y Arturo.
Fuga del hermano
A principios de mayo, los Marín-Sotelo volvieron a convertirse en el centro de atención. En la madrugada del 1 de mayo, Alder se fugó de una cárcel en Virginia.
Alder Marín Sotelo fue visto en un video de vigilancia trepando una cerca y escapando de la cárcel en la madrugada del 30 de abril. El recluso abordó un Mustang Rojo que lo esperaba cerca del recinto penitenciario.
De acuerdo con las investigaciones, fue su hermana Adriana Marín Sotelo quien ayudó a proporcionarle el vehículo. Ella se encuentra detenida.
El 4 de mayo, delincuente fue atrapado en el estado mexicano de Guerrero.