Raleigh.- El oficial de Policía de Raleigh acusado de distribuir cocaína mientras estaba en servicio se declaró culpable en la corte este lunes 13 de marzo.
Así lo informó la fisclaía Distrito Este de Carolina del Norte del Departamento de Justicia.
Los cargos específicos de los que Keven Rodríguez se declaró culpable son:
- Tres cargos por drogas.
- Un cargo por arma de fuego.
Los cargos derivan de la investigación que desembocó en la detención del ex agente en febrero de 2022. La DEA incluso grabó al agente mientras vendía drogas con su uniforme de policía.
Además de los cargos señalados por la distribución de droga como cocaína mientras estaba en horario de trabajo, Rodríguez sumó otros delitos mientras estaba detenido.
El fiscal detalló que el acusado también se declaró culpable de posesión y consumo de sustancias mientras estaba encarcelado.
Como parte del acuerdo por el que se admitió la culpabilidad de los delitos que se le acusan, Rodríguez entregó sus certificados para servir como elemento de seguridad pública.
«Keven Rodríguez violó su juramento de proteger y servir», destacó el fiscal federal Michael Easley, «él nunca más usará la insignia y nunca más ensuciará la honorable profesión de ser policía».
De esta forma, el ex agente no tendrá permitido ejercer como policía en alguna ciudad u oficina del Sheriff de algún condado.
Al declararse culpable de los delitos señalados, el acusado podría recibir una sentencia de al menos 10 años de prisión, destacó la fiscalía federal. Para ello, se espera que Rodríguez reciba sentencia a finales de 2023.
Carrera corta
De acuerdo con información el sitio OpenPayRolls, Rodríguez trabajaba como agente de seguridad en Raleigh desde 2018.
Hasta 2022, el ex agente recibía un pago de casi $50,000 dólares al año, incluidos bonos y otros beneficios otorgados por la agencia de seguridad para la que trabajaba.
Cayó en una trampa
Una queja criminal en contra de Keven Rodríguez, con número de caso 5:22-M1-1164-BM, ofrece algunos detalles del crimen. En este documento federal, un agente de la DEA y detective de la Policía de Raleigh Jeffrey Ladd, presentó la evidencia.
En noviembre del 2021, la DEA y la Policía de Raleigh obtuvieron información de dos distintas fuentes sobre un policía que vendía cocaína en Raleigh.
Uno de los informantes arregló una cita con el oficial Rodríguez para reunirse el 24 de enero del 2022 y comprar dos onzas de cocaína por $2,600, detalla la queja formal que fue entregada al magistrado federal Brian Meyers.
El día que tendieron la trampa al policía, los detectives inspeccionaron el automóvil del informante previo a salir hacia la misión para asegurarse que no había ninguna sustancia prohibida en su interior. También equiparon la unidad con equipo de espionaje, incluyendo cámaras y micrófonos de vigilancia.
Para realizar la transacción ilegal, el punto de reunión acordado fue el local abandonado de la auto concesionaria Bobby Murray Chevrolet en 1820 Capital Boulevard.
A bordo de su vehículo de uso exclusivo para realizar su trabajo como policía, el oficial Rodríguez llegó a la cita antes de la hora pactada y “posicionó estratégicamente su patrulla entre dos edificios abandonados”.
Cuando llegó el informante que colaboraba en secreto con la DEA y la misma Policía de Raleigh, Rodríguez le vendió un paquete que resultó ser cocaína después de hacer una prueba de laboratorio. Toda la escena y conversación fueron grabadas por las autoridades, detalla la queja criminal en contra del policía.