Charlotte. - En lo que constituye una de las pocas iniciativas bipartidistas en el Congreso para lidiar con la situación del creciente flujo de inmigrantes indocumentados a la frontera de México con Estados Unidos, los representantes, Henry Cuellar, demócrata de Texas, y John Katko, republicano de Nueva York, están proponiendo destinar mil millones de dólares para sortear la crisis humanitaria.
La legislación introducida el jueves 1 de abril está diseñada para proporcionar recursos inmediatos cuando se presenta una afluencia significativa de individuos y familias, como la actual, en el borde fronterizo, incluyendo a grupos de menores no acompañados.
Plan de respuesta
Para acceder al fondo económico, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y otras agencias federales necesitarían desarrollar un plan para responder a los aumentos en los cruces fronterizos entre México y Estados Unidos.
El fondo de un billón se usaría para pagar las necesidades humanitarias cuando surjan.
La Ley de Resiliencia y Respuesta al Aumento Fronterizo requeriría que el DHS y los socios federales establezcan una contestación para abordar el aumento de migrantes en la frontera con métricas transparentes para activar el acceso a fondos complementarios.
El plan responsabilizaría a los componentes interinstitucionales de mitigar los cuellos de botella que hacen que las fuerzas del orden público no respondan adecuadamente y provoquen que los niños permanezcan bajo la custodia de la agencia de protección fronteriza CBP por más tiempo del que deberían.
Hablan los autores
“Es fundamental que el DHS sea proactivo y desarrolle una estrategia para gestionar adecuadamente los grandes flujos migratorios en nuestra frontera sur”, dijo Cuellar, quien ha sido crítico del manejo de la crisis por parte de la administración del presidente Joe Biden.
“Después de escuchar de primera mano a los agentes de la patrulla fronteriza, está claro que necesitan respaldo interinstitucional y responsabilidad en todo el gobierno federal para manejar adecuadamente los aumentos repentinos de la frontera”, afirmó Katko.
Emergencia
Proyecciones basadas en estadísticas gubernamentales indican que al final del actual año fiscal del DHS, el país podría encontrarse con dos millones de inmigrantes en la frontera sur.
La propuesta se produce cuando la administración de Biden continúa lidiando con un gran número de personas que cruzan la frontera y la necesidad de sacar a los niños rápidamente de las instalaciones.
Recomendación
La legislación surge de una recomendación del Consejo Asesor de Seguridad Nacional (HSAC), emitida después del pico de cruces fronterizos en 2019.
La sugerencia del Consejo fue proporcionar al DHS acceso a fondos de emergencia para responder rápidamente a eventos de inmigración sin tener que esperar a que el Congreso apruebe un proyecto de ley de asignaciones suplementarias.
Existe un ejemplo
“Cuando ocurre un desastre natural, existe un proceso para responder y aprovechar los fondos para brindar ayuda y garantizar que se aborde la situación”, explicaron los proponentes.
La legislación propuesta requiere una respuesta federal ágil similar para las oleadas fronterizas.
“El fondo permitiría al DHS abordar las necesidades inmediatas de recursos cuando se desarrolle una crisis humanitaria en la frontera para que el Departamento no tenga que reprogramar el dinero de las prioridades de seguridad para financiar alimentos, ropa, mantas, transporte y otros recursos que se están agotando”, explicaron.
Durante las oleadas fronterizas pasadas, el DHS luchó por recibir fondos complementarios oportunos del Congreso que se necesitaban desesperadamente para abordar la crisis humanitaria.
Según los informes, los agentes de la Patrulla Fronteriza compraron ropa y juguetes para niños bajo custodia con su propio dinero en 2019 debido a la demora del Congreso en aprobar el suplemento de emergencia.