Los adolescentes y preadolescentes se comunican a través de redes sociales, salas de chat, blogs, sitios virtuales, etc. Es importante que ayude a su hijo a aprender a navegar por estos lugares de manera segura.
Entre los peligros que acarrea socializar en internet se pueden mencionar el hecho de compartir demasiada información, o publicar comentarios, fotos o videos que pueden dañar la reputación o herir los sentimientos de otra persona.
Según los últimos estudios cada vez son más los niños que utilizan las redes sociales. Muchos pre- adolescentes mienten su edad al armar su perfil para ser aceptados por el sitio.
Un estudio reciente en los Estados Unidos confirma que el 83% de los niños habría mentido sobre su edad para ingresar a una de estas páginas. Además, el 42% de los niños se hace pasar como mayor de edad para poder ingresar a las redes sociales.
Esta es la realidad y son muchos los peligros que puede encontrar un niño en las redes sociales. Es necesario que los padres estén informados y actualizados para acompañar a sus hijos en estas incursiones virtuales.
Los riesgos para los niños en Internet y en las redes sociales
De las nuevas formas de comunicarse han surgido nuevos riesgos o formas de acoso. Los niños son especialmente vulnerables a estos riesgos.
1) El grooming, una práctica a través de la cual un adulto se gana la confianza de un menor con un propósito sexual.
2) El sexting o intercambio de fotografías o vídeos con contenido erótico entre los propios jóvenes con las que luego llegan a extorsionarse causando daños psicológicos importantes.
3) El ciberbullying, o acoso entre menores que en Internet por su carácter global, supone un alcance que puede llegar a generar mucho daños no sólo al menos sino a su familia y amigos.
Precauciones que hay que tomar
1) Cuando su hijo haga un perfil social, enséñele a configurar adecuadamente la privacidad para que el contenido que publique sólo pueda ser visto por amigos.
2) Explíquele que las personas que conoce por internet y son desconocidos en la vida real, NO SON AMIGOS.
3) Enséñele a no publicar información personal como teléfono, dirección, etc.
4) Cuando se publica una foto en Internet, se pierde el control sobre su difusión. Los chicos deben aprender a publicar sólo aquello que no les moleste que sea visto por otras personas.
5) Enséñele que en Internet hay que comportarse con respeto y educación.
6) Explíquele que debe denunciar a las personas o las acciones que molesten a los demás.
7) Dígale que si alguien lo molesta o le hace propuestas que lo incomodan, se lo comunique inmediatamente a sus padres.
8) Revise la lista de amigos de su hijo.
9) Limite la lista de “amigos” a aquellas personas que su hijo realmente conoce.
10) Dígales a sus hijos que no finjan ser otra persona.
11) Enséñeles a sus hijos a evitar las conversaciones de contenido sexual en internet.
12) Familiarícese con los sitios de redes sociales que usan sus hijos para entender sus actividades. Si usted está preocupado porque piensa que su hijo se está comportando riesgosamente, explore los sitios de redes sociales que frecuenta para ver qué tipo de información está colocando y ver con quién se comunica.
13) Asegúrese que sus hijos respeten los límites de edad del sitio que visitan. En general, la edad recomendada para unirse a una red social es 13 años o más.
14) No permita que sus hijos se encuentren en persona con alguien que conocen sólo en línea y aliéntelos a que se comuniquen solamente con gente que conocen en persona. Es realmente peligroso que un niño se encuentre con personas que sólo conoce por Internet.
¿Cómo actúan los abusadores en internet?
1) Establecen contacto con los niños a través de redes sociales, salones de chat, mensajería instantánea, correos electrónicos, etc.
2) Seducen a sus víctimas dándoles atención, afecto, e incluso regalos.
3) Conocen la música y los gustos de los niños.
4) Se identifican con los problemas de los niños.
5) Intentan disminuir las inhibiciones de los niños mediante la introducción de contenido sexual en las conversaciones.
Frase de la semana
“No basta amar a los niños, es preciso que
ellos se den cuenta que son amados.”
Don Bosco